Justiniano estaba muy contento
porque por fin
había encontrado trabajo
como camillero suplente
durante el verano
en el servicio de urgencias
de un gran hospital
pero lamentablemente
parece que sus envidiosos compañeros
están haciendo lo posible
para que lo despidan
ya que se han quejado
a la dirección del centro médico
en relación al innovador método
con el que Justiniano
traslada a los enfermos
desde la ambulancia
hasta la planta que les toca
para que sean atendidos
lo más rápidamente posible
y que consiste
en atarlos por el cuello
dentro de la ambulancia
a la parte trasera
de una motocicleta de montaña
con una cuerda muy resistente
y de forma inmediata
llevarlos a toda velocidad
por las diversas estancias
lóbregos pasillos
y escaleras malolientes
del interminable hospital
hasta entregar en tiempo récord
a los llorones enfermos quejicas
- eso sí, con algunos chichones
múltiples contusiones
y variados rasguños sangrantes
que no tienen apenas importancia -
en el servicio médico correspondiente.
Siendo Justin. .. el q escribe no se si pedir premio??
ResponderEliminarSiendo Justin. .. el q escribe no se si pedir premio??
ResponderEliminarAle pues me arriesgo. Premio?
EliminarAle pues me arriesgo. Premio?
EliminarMuy bien por arriesgarte.
EliminarHas ganado un fin de semana entero viendo a Celia representar diversos papeles teatrales.
Hala, a disfrutarlo, jajajjaajaja
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ResponderEliminarTe descojonarías?
EliminarYa decía yo que tienes un aire muy varonil...
Cuando vamos?
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EliminarOhhhh q chungo, una con barba y el Toro q no se estira ni de broma ni en la nube
Eliminar:-))
Abrazos
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Eliminarrrssss
ResponderEliminarPouco falta, Xavi, pouco falta para que assim seja...
Besos
Qué mala es la envidia eh...
ResponderEliminarUn beso sin ataduras...o sea desatado! jajjahaja
; )
En este país nunca se valoró la eficiencia. ;)
ResponderEliminarEs verdad, para uno que trabaja de manera eficiente...los compañeros qué malas personas. Y encima por lóbregos pasillos y escaleras malolientes, muy duro.
ResponderEliminarLos traumatólogos estarán de un contento...
ResponderEliminarAbrazo.
ResponderEliminarMe lo imagino...
Pero con tanta doctora y enfermera rondando por ahí... ¿seguro que deja a los enfermos en el lugar que corresponde?
A que a alguno le operan de lo que no toca... xP
Beso... divertido!
:)
Es un incomprendido...
ResponderEliminarBs.
pobre Justiniano, él que se tomó tan en serio que trabajaba en un servicio de urgencias
ResponderEliminarBesos
Me entra la risa, pero poco ¿eh?, ya está bien de hacer faenas a Justi, con lo original que es ... no me aguanto, jajaja (atarlos por el cuello ... jajaja ...)
ResponderEliminarPobrecín Justi, si es más riquín que riquín ...
:)
Un beso para él y otro para Toro, que debe encontrarse por el hospital ...
:)
Me sonrio pensando cuando el sea paciente je je
ResponderEliminarCariños
ResponderEliminarVa por libro y también por libre. Le dijeron "urgente" pero no le explicaron el protocolo. Así es que, reclamaciones al maestro armero. No ha lugar la denuncia.
Un beso resistente
Procedimiento, no protocolo. Ahí me colé.
EliminarY digo yo, si los ata por el cuello, no los entrega en destino un poco, como ahogados?
ResponderEliminarSaludos.
sutil, muy sutil, y con bellisimas palabras.
ResponderEliminarbesos
Jajaja.
ResponderEliminarTe te extrañaba Justi!!
Pobres los enfermitos...
El pundonor profesional es incomprendido, incluso temido, por quienes no lo poseen.
ResponderEliminarSaludos.
Estando en la clínica ¿qué es un chichón más?
ResponderEliminarAbrazos
Ya quisieran muchos la oferta laboral de Justiniano. No para. Lo mismo para un roto que para un descosido. Sin exigencias y aportando ideas. Debe ser un hombre capacitadisimo.:0
ResponderEliminarUn beso.
La envidia es muy mala.
ResponderEliminarBesos
Espero que ese hospital esté muy lejos, que no me pille de paso en ninguna urgencia ...
ResponderEliminaren este país siempre despreciamos a los innovadores, en breve los americanos copiaran este sistema y nos lo venderán por millones...
ResponderEliminarFelicito a Justinianiano por haber encontrado trabajo.
ResponderEliminarEs un afortunado.
Besos.
Uy pues que delicaditos. ¿Quieren rapidez? Más veloz que Justi, ninguno.
ResponderEliminarBesos Toroloco
Pobre Justi!!!,luego dirán que no se esfuerza en su trabajo.
ResponderEliminarAnoche te dejé comentario y yo le vi...¿¿¿....??? no, no está
ResponderEliminargracias.
besos
Yo no he eliminado ningún comentario Marina.
EliminarEsto de Blogger cada vez va peor.
Besos.
así es la ralea de los compañeros de trabajo
ResponderEliminarsiempre serruchando el piso
besos
Hola Torito Guapo. Yo también despediría a Justi. Vayas formas jajajajaja. Pobres encima de enfermos achichonados y magullados.
ResponderEliminarBesossssssssss
Hola de nuevo Torito. He vuelto a leerte y me has hecho sonreír.
ResponderEliminarGracias.
Bueno, cómo se lo difama al pobre Justi, hay hospitales cuyo trato no es tan diferente.
ResponderEliminarBesos, Torito.
Pobre Justiniano siempre tan incomprendido!!
ResponderEliminarBesos
Innovador es el Justi, de eso no hay duda.
ResponderEliminarBesos, Toro
apaciguar a los enfermos ha sido siempre una gran obra de caridad
ResponderEliminarMejor que Justiniano reparta pizza a domicilio.
ResponderEliminar
ResponderEliminarUn beso para cada uno...
Para Justi uno veloz,
para ti uno más despacito...
:)
Eso se desarrolla después de comenzar a odiarlos.
ResponderEliminarQué guapo debe ser Justiniano.
Pobres sus pacientes.
Gracias por tu visita y comentario...
ResponderEliminardices que sería bloguer...bueno sería pero había entrado bien ...
besos
Marina
Jajaaaa que bonico es!!!!Besos***
ResponderEliminarEsperemos no le copien otros, ja,ja.
ResponderEliminarBesos a
¿No te llevaría hoy Justi, no?
ResponderEliminarUn beso de buenas noches, Toro.
Buenas noches, Xavi TORO SALVAJE:
ResponderEliminarComentario N.º
:)
Algunos decían conocer a Justiniano,
e insistían en recitar poemas.
Durante el trayecto repetían:
“Punto”
“Signos de admiración”
“Oh”
Aseguraban que era poesía minimalista .
En realidad, creo que inventaban sobre la marcha.
:)
Saludos
Nunca faltan los envidiosos y los que se resisten al cambio, cuando alguien ejecuta un método innovador y sobre todo eficiente. Qué injustos son con Justiniano. Jajaja.
ResponderEliminarUn beso.
Este Justi es terrible. ajajajaja.
ResponderEliminarUn gran abrazo Torito.
Parece que en este caso el fin justifica los medios.
ResponderEliminarAbrazos
Leo hasta aquí y me deleito de muchas formas con cada uno. Pero mi amigo Justiniano me delira con sus ocurrencias. Ahora me despido de él hasta mi vuelta ya que me voy a Las Termas de Río Hondo. Dile que ya le mostraré fotos. Besos a los dos.
ResponderEliminarEs lo que pasa cuando aparece alguien que trabaja.
ResponderEliminarMi solidaridad y que les den a los envidiosos.
Bss