Se acercan las navidades
y con ellas
los rencores ocultos
y malentendidos familiares
tan propios de esas fiestas
y con el fin de ayudar
a salir airosos
de forma discreta y respetuosa
de tanta amargura y resentimiento
resulta del todo aconsejable
llamar por teléfono
a mediados de noviembre
-para que esos canallas no sospechen-
a padres, hermanos, primos, cuñados
abuelos, tíos, suegros, yernos, nueras...
y decirles claramente que dan mucho asco
y que lo mejor para el planeta
sería que sus caras feísimas
y sus cuerpos malolientes y repugnantes
desaparecieran para siempre y no verlos más.
Con esta fina y elegante forma de actuar
desaparecerán mágicamente las tensiones navideñas.
Mira, te libras de la cena de Nochebuena seguro jaja
ResponderEliminarBesitossssss
Oh! Te vas a quedar sin turrones.
ResponderEliminarSaludos.
Vaya, te veo imbuido del auténtico espíritu navideño :D
ResponderEliminarBesos.
Tensioni familiari che si accentuano in prossimità delle feste...grande realtà in versi.
ResponderEliminarBuona domenica
Dios los cría y ellos se juntan, tal cual.
ResponderEliminarMucho mejor seguir el consejo del poema y vivir en paz.
Bss!!!
Entonces... ¿tenemos que olvidarnos de aquello que decía Fofó de: «No hay nada más lindo que la familia unida»?
ResponderEliminarSaludos.
¡Ay, Toro Salvaje! No te veo pasando unas felices navidades.
ResponderEliminarUn abrazo y ánimo.
No empieces, no me destruyas la emoción de andar buscando tu regalo para este año.
ResponderEliminarBesos desencantados :)))
🤣🤣🤣🤣🤣🤣😂😂😂
ResponderEliminarBesos para el chico más guapo de Cataluña!
Jajajaja me encantó tu consejo. La verdad es que desde que mis abuelos fallecieron, las navidades se reducen a hermanos y sobrinos. Y solo viene un hermano , así que no pasamos por esos feos ratos. Saludos
ResponderEliminarDe vegades és millor comprar-se el torró, llagostins, raïms i el que faci falta i passar-les a casa, amb la roba més còmode que tinguis i ben calentó... ;-)
ResponderEliminarPetonets, Xavi.
Más vale solo que mal acompañado. Las navidades ya no son lo que eran, aunque siempre ha habido sus más y sus menos.
ResponderEliminarNo me gustan las navidades Toro, pero si celebrar el fin de año, por supuesto.
Feliz noviembre.
Un abrazo
Y las cenas de empresa?
ResponderEliminarAbrazooo
La persona más detestada de la familia ya no mantiene ningún vínculo conmigo. Las cenas serán gratas.
ResponderEliminarJajajja, no me extraña que haya tensiones. A mí me gustan las comidas de Navidad, los encuentros, las fiestas, de empresa, con familiares, viejos amigos... Qué haces tú en estas celebraciones? lo mismo que el resto del año?, ves? ...
ResponderEliminarTú cortas por lo sano jajaja
ResponderEliminarSería ideal poder hacer una criba. Las Navidades me dan una pereza... demasiada hipocresía, empacha. Besos
ResponderEliminarEstá bien para ciertos personajes.
ResponderEliminarAunque no todos :-))
Besos.
Un fantástico remedio. Besos
ResponderEliminarA veces mucho mejor solo que mal acompañado.
ResponderEliminarBesicos muchos.