Justiniano estaba paseando
cuando ha visto sentadas en un banco
a dos mujeres guapísimas
que le han robado el corazón
y sin pensárselo dos veces
ha rebuscado en una papelera
y ha arrancado las anillas
de dos latas de cerveza vacías
y de un salto prodigioso
ha aterrizado de rodillas
ante las dos bellísimas mujeres
declarándoles su amor
y ofreciéndoles las preciosas anillas
como prueba irrefutable
de sus serias intenciones
pero esas dos marquesas creídas
no le han hecho el más mínimo caso
y han seguido hablando entre ellas
como si él no existiera
por lo que Justiniano muy enfadado
les ha quitado los zapatos
con una velocidad pasmosa
arrojándolos a una alcantarilla
y ha vuelto rápidamente a su casa
para recuperarse del disgusto
con una cerveza y un bocadillo de jamón.
cuando ha visto sentadas en un banco
a dos mujeres guapísimas
que le han robado el corazón
y sin pensárselo dos veces
ha rebuscado en una papelera
y ha arrancado las anillas
de dos latas de cerveza vacías
y de un salto prodigioso
ha aterrizado de rodillas
ante las dos bellísimas mujeres
declarándoles su amor
y ofreciéndoles las preciosas anillas
como prueba irrefutable
de sus serias intenciones
pero esas dos marquesas creídas
no le han hecho el más mínimo caso
y han seguido hablando entre ellas
como si él no existiera
por lo que Justiniano muy enfadado
les ha quitado los zapatos
con una velocidad pasmosa
arrojándolos a una alcantarilla
y ha vuelto rápidamente a su casa
para recuperarse del disgusto
con una cerveza y un bocadillo de jamón.
Jajajajaja, es que Justiniano se recupera pronto. Desde luego es un todo terreno para las desgracias y sabe torearlas muy bien. ES un incomprendido tanto en el poema de la derecha como en el de la izquierda.
ResponderEliminarPero vale más de lo que nos pensamos, y graciosísimo jajajajaja a más no poder.
Si no estuviera comprometida le pedía que fuera mi novio. Yo no soy engreída como esas dos mujeres jajajaja.
Besos
Mejor con la cerveza y el bocata que intentando seducir a quienes no saben apreciar el gran corazón de Justiniano.
ResponderEliminarBesos
ResponderEliminarJustiniano tiene claras las cosas... nada como un bocadillo de jamón con una cerveza... y ¡a otra cosa mariposa!
Que no estamos como para perder el tiempo.
Beso... Xavi.
Y mi mano en tu mano... de calidad y denominación de origen 'Toro Salvaje'.
🥀
Bueno, no le supieron valorar...
ResponderEliminarBesos.
Mucho se está hablando últimamente en este blog de hincar la rodilla en tierra...ese subconsciente...🤣🤣🤣
ResponderEliminar“Don de gentes” tiene Justi pa regalar🙃
Un beso💍
😆
Eliminar😂😉
EliminarUna buena cerveza y un bocadillo de jamón son casi indistinguibles del amor verdadero, bien hecho :)
ResponderEliminarBuen sistema para recuperarse de los males de amor😆
ResponderEliminarLos bocadillos de tortilla de patatas sirven también?
Besos***
Un bocadillo de tortilla de patata?? Eso resucita a un muerto!! Qué bueno!
EliminarEstas dos marquesas no hubieran rechazado a Justiniano si le hubiese entregado un anillo con un diamante como un garbanzo. Nadie les hará tal regalo así que se joden.
ResponderEliminarUn beso.
Pues Justiniano hizo bien por que ese tipo de desplantes no se le aceptan a nadie. Además, una cerveza helada y un buen bocadillo en ocasiones valen más que ciertas personas.
ResponderEliminarAbrazo Toro.
:)...
ResponderEliminarBien, supongo que en la mente justa de nuestro amigo no hay cabida para la ley hecha por los hombres en base a su cultura y tradiciones. Porque si él siente que tiene mucho para dar y compartir, su planteamiento de poli amor, es coherente con lo que le dicta su corazón...
ResponderEliminarDifícil papeleta a resolver. Menos mal que a fuerza de costumbre aprendió a relativizar todos sus problemas.
Bon appétit, Justiniano.
El corrector tampoco admitió el poliamor como es
EliminarJa, ja, ja... este Justiniano, es todo un personaje, Poeta... pero le intuyo cierta ternura.
ResponderEliminarMil besitos cariñosos para ti.
Bueno, una cosa por la otra jajaja
ResponderEliminarJajaja, que se coma dos bocadillos mejor que uno.
ResponderEliminarYa tengo ganas de que algún día le salgan bien las cosas.
Besos
Justiniano é incorrígivel ... rrssss
ResponderEliminarBesos
Muy divertido. Este Justiniano me hace reír lo suyo.
ResponderEliminarUn beso
Ellas se lo pierden (además de los zapatos, claro).
ResponderEliminarSaludos.
¡Delicioso!
ResponderEliminarAi si no fos per la cerveseta i el pernil!😉
ResponderEliminarM'has tret un somriure.
Petonets, Xavi.
Buena manera de recuperarse 🌭🍺
ResponderEliminar(Hay clientes muy irascibles…)😎
Un abrazo grande, querido poeta.
i adore this post:) so lovely written:) follow! Hope U follow back:)
ResponderEliminarParece que fue un demonio.....
ResponderEliminarNo es bueno juzgar
Las quiere a pares, je,je, perdona que me ría Justiniano, me da mucha penita por tí, se me nota?
ResponderEliminarBesos 😀
Es que esta vez ...pobre Justiniano derrapó jajajajja(asi decimos en lunfardo en mi pais)...quiso hacer buenas migas con dos..Parece que una , no le bastaba !!!( será la pandemia??? jjajaja)
ResponderEliminarAmo esas ocurrencias de mi héroe.. y suerte que solo les quitó los zapatos!! Pero bueno...después optó por estomago lleno y corazón contento ..
Agradecida por esta regreso de Justi que pone color y sonrisas a los dias!!! Besos y linda tarde
Seguro que el bocadillo y la cerveza, le han sabido a gloria. Cuando vuelva a llamar al servicio de telefonía, a ver si encuentro a un clon de Justiniano y por lo menos le entiendo lo que dice.
ResponderEliminarBesicos muchos.
jajajaja me ha encantado. A veces pienso que qué mas se te puede ocurrir con Justiniano... y veo que tu imaginación no tiene límites.
ResponderEliminarUn besazo con zapatos puestos.
No hay nada como una cerveza y un bocadillo de jamón para quitar las penas de amor.
ResponderEliminarBesitos
Nada como un buen bocadillo,cariños
ResponderEliminarEs el mejor antídoto contra la dpresión.
ResponderEliminar"...les ha quitado los zapatos..."
ResponderEliminarJajaja...
Un beso, Justi.
Se hubiera quedado con esos zapatos, como prueba de amor que alguna vez les tuvo.
ResponderEliminarVa un abrazo.
Ah mi lindo Justiniano, nadie lo comprende. Un placer leerte amigo Toro. Saludos.
ResponderEliminarQue desagradecidas
ResponderEliminarCon el frío que hace, habrá vuelto con los pies helados. Pobre
Besos, Toro
Lo primero estuvo bien.
ResponderEliminarPero le falta trabajar la reacción ante los rechazos o ante la indiferencia.
Talvez hubiera funcionado el invitarlas a tomar cerveza.
Yo haría lo mismo, desde luego dos tontas de remate. La próxima iré a tomar una cerveza con Justiniano. Espero que no me haga ninguna trastada.
ResponderEliminarA mi me hubiera conquistado con el bocadillo de jamón y cerveza.
ResponderEliminarjajajjajaa
Besos Justi.
Si ya lo dice la sabiduría popular: las penas con pan son menos penas y si metes jamón, mucho mejor :D
ResponderEliminarLo que hubiera dado por ver ese salto prodigioso y ver cómo les quitaba los zapatos!!!
Bss.
Siento que esta historia de Justiniano es la historia de mi vida
ResponderEliminarAbrazos