Hola Torito. Nacemos para morir y luego con el tiempo para ser olvidados. Sólo recordamos a los que han hecho algo grande por el la supervivencia del mundo o a las personas que nos han hecho más cómoda nuestra existencia. Se les recuerda por los libros, porque los libros son inmortales. Vaya visita más mala. Joer, os daba la comida. Nosotros lo pagamos una vez al año. Mi padre nunca lo pagó, dice que cuando se muera le hemos a los perros. Los humanos somos tontos de remate, pagamos nuestro entierro en vida. Besos
Desgraciadamente cada día parten más vuelos a ese mundo de recuerdos. Corto, directo y contundente, tu poema. El poema de la derecha recuerda una época real cuando se cobraba en manos. Ahora, al menos, solo aparece en los extractos.
"El de los muertos" el del ocaso... te he leído y parecía que estaba en casa, otra vez niña viviendo todo aquello de nuevo. Tan real como la parvedad que nos dejas hoy, Poeta.
Mil besitos que te lleguen con cariño y muy feliz día.
Las cenizas se las lleva el viento. Los recuerdos terminan por irse. Aquí hay un dicho que dice: lo pasado pisado, tal vez lo conoces. Un abrazo grande, cúidate mucho, la cosa va para peor.
¿ Cuánto duran en el recuerdo ? ¿ Una generación si acaso ?
ResponderEliminarAl final es tan polvo como el cuerpo
Un recibo pequeño y blanco.
EliminarPequeño como un nicho
Blanco como un sudario. 🖤
Hola Torito. Nacemos para morir y luego con el tiempo para ser olvidados. Sólo recordamos a los que han hecho algo grande por el la supervivencia del mundo o a las personas que nos han hecho más cómoda nuestra existencia. Se les recuerda por los libros, porque los libros son inmortales.
ResponderEliminarVaya visita más mala. Joer, os daba la comida. Nosotros lo pagamos una vez al año. Mi padre nunca lo pagó, dice que cuando se muera le hemos a los perros. Los humanos somos tontos de remate, pagamos nuestro entierro en vida.
Besos
Pues que no nos pille don Alzheimer, porque entonces será trágico pero de verdad :-)
ResponderEliminarUn beso
Perdón, quise decir le echemos a los perros.
ResponderEliminarMás besos
Tantos vuelos últimamente...🙁
ResponderEliminarQué siniestra (y perfectamente reflejada) aparición la del cobrador pelirrojo...y cada més! uffff
Se encoge el corazón.
Un beso conmovido.
Desgraciadamente cada día parten más vuelos a ese mundo de recuerdos. Corto, directo y contundente, tu poema.
ResponderEliminarEl poema de la derecha recuerda una época real cuando se cobraba en manos. Ahora, al menos, solo aparece en los extractos.
Un beso.
Recuerdos para otros recuerdos.
ResponderEliminarSaludos.
La vida pasa en un suspiro,
ResponderEliminarUn abrazo.
ese universo es más grande cada vez. importa que no se vayan (ni olviden) los que los conservan
ResponderEliminarSaludosss toro
Así es...
ResponderEliminarPero no olvides que un hombre es revivido cuando su nombre es recordado
ResponderEliminarLa muerte y sus preámbulos.
ResponderEliminarYo también recuerdo al cobrador del Ocaso en casa de mi tía abuela. No era bien recibido, cuando se iba el aire cortaba y el silencio se imponía.
Tus dos poemas son magníficos, en el del perfil reflejas a la perfección la situación y el ambiente.
Un beso.
Y allí, se cubren de polvo.
ResponderEliminarToro, que tengas un día muy inspirado. Un saludo.
Recuerdos que acabarán enterrados
ResponderEliminarcon el paso de los tiempos...
Besos
Toro, dejemos temas tan tétricos.
ResponderEliminarSon reales, sí; pero también es real que hay nacimientos y vivos.
Saludos
Nos queda su energía, al menos eso quiero pensar.
ResponderEliminar"El de los muertos" el del ocaso... te he leído y parecía que estaba en casa, otra vez niña viviendo todo aquello de nuevo. Tan real como la parvedad que nos dejas hoy, Poeta.
ResponderEliminarMil besitos que te lleguen con cariño y muy feliz día.
ResponderEliminarPues por desgracia, sí...
Menuda racha llevamos últimamente, en mi círculo cercano, de nombres y cenizas... y lo que nos queda...
Encuentro de recuerdos con el 'Ocaso'...
Beso... Xavi.
Y mi mano en tu mano...
🥀
Y del recuerdo a la Nada, en un suspiro.
ResponderEliminarSe vive de recuerdos y eso es lo malo
ResponderEliminarVivir solo este momento
y salir volando pa' otra cosa
Que tengas un dia lleno de sol
Así es Torito, nombres y cenizas en un suspiro de nada.
ResponderEliminarBesos.
Las cenizas se las lleva el viento. Los recuerdos terminan por irse. Aquí hay un dicho que dice: lo pasado pisado, tal vez lo conoces.
ResponderEliminarUn abrazo grande, cúidate mucho, la cosa va para peor.
Mentre els tinguem en el record, estaran amb nosaltres.
ResponderEliminarPetonets, Xavi.
Recordemo-los para que não desapareçam de todo.
ResponderEliminarBesos
algo natural, el desenlace propio de la vida...tenemos este "hoy" y es casi una obligación hacerlo precioso. Besossss
ResponderEliminarA los que pasan de cuatro sílabas hay que ayudarles un poco, porque les pesa el culo.
ResponderEliminarSaludos.
Y con el paso del tiempo esas cenizas desaparecen y es como si no hubiésemos existido.
ResponderEliminarSaludos, Toro
Polvo y aire…
ResponderEliminar(Me has llevado a recordar lo mismo…)
Leerte nunca deja indiferente...
Un abrazo grande, querido poeta.
Hola Toro!! Hoy te encuentro archivando recuerdos!! Siempre muy organizado; igual que yo!!
ResponderEliminar:)
Un beso ❤
Genial y escalofriante poema el del cobrador pelirrojo.
ResponderEliminarAbrazo***
Tantos se fueron... 😭😭😭
ResponderEliminarBesos
El universo de los recuerdos está abarrotado.
ResponderEliminarRecordaba el poema del cobrador, es impactante.
Besos
Descansen en paz.
ResponderEliminarUn beso, Toro.
Precioso y reconfortante. Acabamos de pasar unos cuantos seísmos seguidos!! 2021 empezó con fuerza!!
ResponderEliminarBesicos muchos.
Tantos!!!
ResponderEliminarAbrazos
Cuánto que recordar de tantas personas... :(
ResponderEliminarAsi es Toro. Saludos amigo.
ResponderEliminarLo leí ayer, pero no te pude dejar comentario.
ResponderEliminarMe encantó como lo has dicho, y así es.
Muchos besos.
Ojalá al menos no nos falle la memoria
ResponderEliminarBesos
Tantos nombres que son ceniza y recuerdo...
ResponderEliminarBss.
Más livianos que el aire
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