Justiniano despierta.
Viernes.
Siete de la mañana.
Levanta la persiana.
Mira por la ventana.
Al otro lado del cristal
una selva de cemento
donde viven miles y miles de locos.
La misión sigue siendo
dar luz a su corazón
sin haber sido apresado
por esa marabunta de perturbados.
Justiniano se pone en guardia.
Un zapato en cada mano.
Nunca se sabe.
Hay gigantes, monstruos y demonios
que incluso a veces
escalan sádicamente por las paredes.
El peligro está en todas partes.
Abre la ventana.
Un magnífico silencio.
Se asoma.
A lo lejos ve
unos cuantos desquiciados
pululando por la calle aún oscura.
No tienen buena pinta.
Cierra la ventana.
De momento no ha sucedido nada.
Deja los zapatos en su sitio
y se prepara heroico
para otra durísima jornada.
En la mesita
coloca con devoción
el gran libro sagrado:
"Don Quijote de la Mancha".
Se arrodilla
y jura solemnemente
con una mano sobre la cubierta
que seguirá buscando
por esa intrincada y peligrosa selva
sin importarle peligros ni heridas
a su Dulcinea misteriosa y secreta
para que el amor los ilumine de por vida.
Ya lo dijo cervantes....hace años
ResponderEliminarEn fin...
Suerte
Una ricerca approfondita per raggiungere una meta d'amore.
ResponderEliminarBuongiorno
El Justijote que tantas aventuras nos da. Su biblia no podía ser otra!
ResponderEliminarBesitosssss
¡ Qué le sea leve! No creo que queden Dulcineas. Besos
ResponderEliminarEl Quijote es para mí el libro de los libros y Justiniano es mi héroe, ahora en busca de su Dulcinea. Hay que ser muy insensata para no caer rendida a sus plantas.
ResponderEliminarOjalá Xavi los dioses no te abandonen y tardes en ir a tu entierro. Aleja de ti la locura que produce un dolor corrosivo.
Un beso.
Ainss...es que no puede/s ser más bonico💙
ResponderEliminarAbrazo***
Y no hubo misión más bella que ésa
ResponderEliminarCapítulos de un hombre que vivió "loco"
y murió "cuerdo", siendo más feliz y sensato en su locura
que los oscuros laberintos cuerdos, en su cordura.
Más parece que tuviere razón, pues de todo lo que dijo,
dijo verdad y precedente
"Confia en el tiempo, que suele dar dulces salidas a muchas amargas dificultades." Miguel de Cervantes
Que la locura te siga dando luz
ResponderEliminarQue la cordura no logre tocarte nunca
Vamos por la Dulcinea que espera del otro lado
Abrazos
Qué bonito por favor.
ResponderEliminarBesos para el chico más guapo de Cataluña!
Estaba claro que Justiniano no tiene como héroe a Batman, no, tiene al loco más español de todos, el de la honra sin dinero, el de la gallardía, sin valor...
ResponderEliminarQue tenga suerte en la búsqueda de Dulcinea. Saludos
ResponderEliminarAinssss, me enamora este Justiniano. Que majico. Besos
ResponderEliminar✋
EliminarEs adorable, tiene que encontrar pronto a su Dulcinea.
ResponderEliminarLa parte de los zapatos encanta
Bendito ingenio, Xavi. Que nunca te falte :))
Besos de anís.
Molt tendre aquest Justi, capaç de tot per la seva Dulcinea.
ResponderEliminarPetonets, Xavi.
Esperemos que encontre a sua Dulcineia.
ResponderEliminarBesos
Me he propuesto viajar por el mundo y de ese modo conocer a los personajes que leo en los blogs.
ResponderEliminarJustiniano es uno de aquellos que quiero conocer y saludar en persona. Si requiere un escudero yo me voy con él.
El segundo poema es increíble, no se puede expresar mejor el día a día de una persona y a su vez convertirlo en el día a día todos los que te leemos y nos identificamos de inmediato con lo que sientes y escribes.
ResponderEliminarPor otro lado Espero que mi amigo Justiniano encuentre pronto a su amada Dulcinea, el muchacho se lo merece.
Un abrazo fuerte poeta.
Llevar un Quijote dentro es de las locuras más bonitas. Precioso.
ResponderEliminarTodavía queda gente que tiene héroes como Dios manda.
ResponderEliminarSaludos.
El que busca, dicen que encuentra. Nuestra misión es buscar al ser que se esconde o al que aún no hemos encontrado y el pobre Justi que sabe todo de la vida, lo único que quiere es encontrar a su Dulcinea. LO que él no sabe es que lo mismo está a la vuelta de la esquina esperándole.
ResponderEliminarMe encantan las aventuras de mi Justi, es tan tierno!!
Besicos muchos.
¿Y a quién va a llevar de escudero? ;)
ResponderEliminarTus personajes son increíbles 👏👏
ResponderEliminarBesos.
¿La panadera es la Dulcinea de Justiniano?
ResponderEliminarQué imaginación , Dios santo!
ResponderEliminarTorito, preciosos los dos poemas.
ResponderEliminarQue dulce es Justiniano, ojalá que encuentre a su Dulcinea misteriosa y secreta, se lo merece por tierno y bueno.
Abrazos y te dejo un besito, que tengas un feliz inicio de semana
Antes de dos posts le escribí al remedo de Rocinante. Un cuaco michoacano parecido al del Quijote. Un poco mal hablado pero gracioso. Mexicano pues.
ResponderEliminarUn beso
Me alegra volver a saber de Justiniano, sorprendida de que devuelva los zapatos a su sitio, esa identificación con Don Quijote no me la esperaba.
ResponderEliminarQue el amor le lleve por derroteros favorables, un besito.
Ayer estuve en la calle Justiniano, y me acordé de él.
ResponderEliminar; )
Menos mal que Justiniano no se da por vencido.
ResponderEliminar¡Qué personaje más encantador!
Besos
Ojo cuidao con Dulcinea, que ya sabes cómo era en realidad ;)
ResponderEliminarPero bue, al menos sería buena persona y eso en estos tiempos, es oro puro.
Bss!!!