25 de noviembre de 2025.
Falta un mes para Navidad.
En las calles de mi barrio
ya han puesto
la decoración navideña.
Son luces de cálidos colores.
Las de otros años eran feas.
Eran luces heladas y siniestras.
De un verde y rojo eléctrico
que agredía a la vista.
Las de años anteriores
eran luces hechas por dementes
que invitaban al suicidio instantáneo.
Mi cabeza me retrotrae.
No puedo evitarlo.
Es más poderosa que yo.
Ahora mismo
escucho desde el pasado
los villancicos de mi infancia.
Resuenan inexplicablemente en mi corazón.
Mi madre los está cantando mientras cocina.
Tengo doce años y la navidad me ilusiona.
En la mesa de la cocina
escribo con cuidado
felicitaciones navideñas
para la dispersa
y cada vez más lejana familia.
Mis primos estarían haciendo lo mismo.
Esas felicitaciones eran preciosas.
Doradas y plateadas y con bonitas ilustraciones.
Ahora ya nadie escribe.
En el mejor de los casos
recibiremos a última hora
algunos whatsapps de usar y tirar
con textos copiados de alguna red social
para intentar hacernos creer que nos quieren.
Fingimiento digital para tranquilizar conciencias.
Los eliminaremos
como si fueran publicidad invasiva
y en cinco segundos estarán en la papelera virtual.
Después llegarán las celebraciones tras duras negociaciones.
Brindaremos con el descalabro acompañados del declive.
Y los villancicos
se amargarán
en las cansadas gargantas
cuando la duración de la farsa invite a la huida.
Cómo ha empeorado el mundo.
Lo que fue bonito ahora es deprimente.
No sé qué ha pasado con la vida.
Me asomo a la ventana: todo es frío, feo y desolado.
Además, ahora es de día y no puedo ver las cálidas luces navideñas.
Sabes qué sabes qué sabes qué
ResponderEliminarHoy es mi cumple!
60 redondos madremíadelamorhermoso :D
Besitosssss
Muchas felicidades!!!
EliminarSiempre serás una niña.
:)
Besos.
Felicidades coetáneos ( creo que mo he escrito nunca esta palabra)
EliminarAbrazooo
Me has traído tantos recuerdos...
ResponderEliminarTarjetas, sí que eran bonitas!
Aunque nunca me gustó la Navidad, pero me conmueve la imagen de tu madre cantando en la cocina, me trajiste a mi madre haciendo lo mismo❤️
Abrazo fuerte***
:)
EliminarAbrazo fuerte.
Lo has descrito tal cual... qué recuerdos, esas tarjetas navideñas de Ferrándiz, tengo una pequeña colección. Ya es de día, sí, se apagarón las luces, habrá que encender las del corazón a ver si brillan con la misma calidez.
ResponderEliminarMuchas Felicidades, Lopillas. A pasar un excelente día. Abrazos para los dos
Un Natale che un tempo era gioia ora riflette nostalgia e malinconia per la perdita di calore e autenticità.
ResponderEliminarBuona giornata
Cuánta razón tienes, yo recuerdo esas postales, la ilusión de recibirlas, de intercambiarlas en el cole con otras compañeras que te deseaban las mismas mejores navidades, parece como que antes éramos más sensibles y estábamos más enfocados en el momento. Hoy me has pillado.
ResponderEliminarCuántos recuerdos.
ResponderEliminarYo aún escribo tarjetas de Navidad a los niños. Las busco con antelación para que sean desplegables y vistosas. Les encanta recibirlas y de vez en cuando les escribo cartas.
Un beso.
Cierra la ventana que hace frío y Dan malas tentaciones ( bueno, dentro de un mes)
ResponderEliminarAbrazooo
Hai ragione manca 1 mese a Natale!Buona giornata.
ResponderEliminarToro, hay que prepararse para lo que nos espera. Saludos
ResponderEliminarLo que ocurre, creo, es que ya no somos niños. Yo también tengo bonitos recuerdos de la Navidad de la infancia. Y sí es verdad que eran más sencillas, ahora todo se ha vuelto desmesurado y hortera. Así lo veo yo, a lo mejor a los niños de ahora les gusta.
ResponderEliminar¿Y te gustaba escribir felicitaciones navideñas? A mí no, jajaja.
Besos!!
A mí tampoco pero mi madre era implacable, jajajaja
EliminarBesos!!!