Justiniano está experimentando
en su propia carne
aquello de que la primavera la sangre altera
ya que se ha enamorado
de una camarera muy joven que trabaja
en la terraza de un restaurante cercano a su casa
y para lograr causarle una buena impresión
a pesar de los muchos años que los separan
se ha comprado un monopatín de color rojo
y esta mañana con un ramo de flores en la mano
se ha deslizado a toda velocidad hacia su amada
pero por cuestiones físicas que aún no comprende
no ha podido frenar a tiempo
y desgraciadamente la ha arrollado
causándole diversas y graves fracturas
y probablemente también
alteraciones de marcado carácter parapsicológico
ya que la bella camarera es ahora un terrorífico diablo
que desde el suelo no hace más que insultarlo y amenazarlo.
La intensidad lo traiciona...
ResponderEliminarBesos***
Una desagradecida. De buena se libró Justi.
ResponderEliminarSeguro que no le dijo que compartían los gastos del arreglo del monopatín. Una tacaña.
Un beso.
Jajajajaja...la imagen de Justiniano con la gorra y el monopatín me ha sacado una sonrisa.
ResponderEliminarAy, pobre Justiniano...la física no lo acompaña.
Un abrazo.
Justiniano solo quería hacer una puesta al día de su persona para agradar y se encuentra con la siempre incomprensible actitud de la fuente de sus inspiraciones. No hay quien entienda a cierta gente.
ResponderEliminarSaludos.
jajajajajajajajajajajajajajajaaaaaa
ResponderEliminarAdorado.
Los actos de amor desesperados sólo funcionan en las películas románticas... en la vida real.... ni idea, la verdad, a veces pienso que nada funciona en la vida real..
ResponderEliminarMenos mal que nos quedan las películas....
Justiniano es demasiado impulsivo, lo que le trae problemas continuos ... pero, claro, si dejas de ser impulsivo ya no sería Justiniano
ResponderEliminarDesgraçado que é Justiniano... nada lhe corre bem!
ResponderEliminarBesos, boa semana para ti e para ele
Hi ha aparells que millor deixar-los per als més joves o només fer-los servir sense tanta energia primaveral. Pobre Justi!.🤭
ResponderEliminarPetonets, Xavi.
aym vaya por dios, pobre Justiniano!
ResponderEliminarGostei muito da publicação!!
ResponderEliminar-
As agruras do tempo ...
Beijos e uma excelente semana.
unfortunate for Justinian.....
ResponderEliminarHave a great day
Pobre Justi, tan incomprendido....
ResponderEliminarBesos.
Bueno Justi es un enamoradizo, pero en primavera sus sentimientos se hacen mas intensos. Justi tiene que saber que el amor aveces es incomprendido.
ResponderEliminarBesos.
Que mala suerte en el amor tiene Justi, por un accidente de nada, cuánto odió hay en el mundo.
ResponderEliminarUn saludo
Incomprendido Justiniano...si es que el amor es muy malo y nos vuelve torpes.
ResponderEliminarAy ese Justi, por eso lo adoramos.
ResponderEliminarBesos Justi nada más para ti.
Pobrecito, qué penita :-).
ResponderEliminarUn beso
Es que, de todos es sabido, las camareras guapas tienen muy poco aguante. No puede uno ni enamorarse de ellas. Ni siquiera hacerles regalos con la mejor intención.
ResponderEliminarSaludos.
Vaya derrape... romántico.
ResponderEliminarBeso... Xavi.
Y mi mano en tu mano...
🥀 🐾
Iba embalado hacia su objetivo pero por cuestiones físicas incomprensibles...jajaja
ResponderEliminarMenos mal que no se desanima.
Besos
jajaja,pobre,no supo calcular ,iba con tantas ganas,,,,jajaja,torito eres el mejor balsamo para los que leemos,gracias por compartir.Un abrazo cariñoso desde Chile lindo.
ResponderEliminarLas prisas no son buenas, je je je
ResponderEliminarAbrazos
Jjajajaja, llevo riéndome un rato de imaginar a Just encima de un monopatín.
ResponderEliminarOh.... el amor....
pobre Justiniano.... no tiene suerte en el amor 😍
ResponderEliminarPobre Justi,con la emoción cogió demasiado impulso...
ResponderEliminarY mira que llevaba el ramo y todo...pero esa tiquismiquis...
Besos rojos (como el patín,qué bonito)
Es lo que tiene la pasión,que no conoce límites. Pobre Justiniano y pobre camarera!! :)
ResponderEliminarDicen que lo que cuenta es la intención, pero no creo que la camarera esté muy de acuerdo.
ResponderEliminarAyyy, los impulsos de mi pobre Justi, ¡Qué mal parado acaba y nunca mejor dicho!!
ResponderEliminarBesicos muchos.
No se quién inventó el monopatín, pero seguro no pensaba en el bienestar del ser humano.
ResponderEliminarEn las calles de Buenos Aires de cada 10 conductores de monopatín 10 atropellan o son atropellados.
Abrazos
Mira que al monopatín lo carga el demonio :D
ResponderEliminarJustiniano sigue siendo mi héroe.
Bss.