Noche terrible.
Varias pesadillas
en el mismo sentido.
Retorno laboral.
Empresa de hace años.
Todo funciona muy mal
y no puedo solucionarlo.
La cama: un campo de batalla.
Sábanas completamente arrugadas.
Almohada casi asfixiada.
Noche horrorosa.
Noche de angustia y condena.
Por fin despierto
y respiro muy aliviado.
De repente nos de la risa.
La muerte
(sentada en la cama)
y yo
no podemos parar de reír y reír.
La muerte es tan amiga tuya que te quiere en este mundo para venir de visita y cambiar de aires.
ResponderEliminarUn beso.
Al menos os lo tomáis con humor.
ResponderEliminarSaludos.
Claro! Es que es lunes
ResponderEliminarQué bueno mandar a la porra el trabajo. Disfrútalo!
Besitosssss
No ha podido contigo pero aún así ríe, qué acojone.
ResponderEliminarLa presencia de la muerte hace que todo lo demás sea algo ridículo. De ahí las risas. Saludos mañaneros, Toro.
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