CALEIDOSCOPOEMAS 10

Hace días que mi cuerpo sale de casa
y me parece que cada día va al trabajo
o al menos eso explica cuando vuelve
y se sienta cansado en el sofá suspirando.
Yo no le digo nada.
Nos hemos divorciado civilizadamente.
Ya me da igual donde vaya.
Yo me quedo aquí todos los días.
Un ectoplasma de nada
mirando las musarañas todo el día.
Soy inmune al tiempo.
Y a la desesperanza.
Cuando uno se bifurca del cuerpo
ya nada ni nadie puede asustarle.
Me siento invulnerable.
Empiezo a parecerme a aquel muerto
que me vino a ver una noche antes
de que tuviera que salvar la vida a su hijo.
Un hijo depresivo que se quería suicidar
porque su padre se había suicidado.
Todavía estoy esperando que me dé las gracias.
Mucho avisar la noche de antes
dándome un susto de narices
la noche siguiente
pero luego de agradecimientos ni uno.
En fin...
Eh.... qué es verdad todo!!!
Vale, ya no cuento nada más incrédulos...
Sigo con mi cuerpo.
Es que no para en todo el día.
Ahora ha vuelto de dar un paseo por la playa.
Se sienta en el sofá
y cuenta que hace frío en la orilla
y que las olas estaban estornudando...
Claro... gripe de olas...
Empiezo a sospechar
que a mi cuerpo se le está bifurcando la cabeza.
Pronto seremos tres.
Mi cuerpo.
Mi cabeza.
Y mi ectoplasma de versos y poemas.
De hecho mi cuerpo no habla.
Aún.
Todo esto lo sé por telepatía de última generación.
Ni los japoneses tienen una así.
Este prodigio de bifurcación es irreversible.
Y yo me pregunto que ocurrirá con mi esctoplasma
si por ejemplo mi cuerpo es atropellado mañana y fallece.
Y si se le ha bifurcado la cabeza qué hay que hacer?
He buscado en Google y no he encontrado nada.
Todas las búsquedas me llevan a páginas de parapsicología.
He leído algunas y bueno... digamos que muchas son cómicas.
Pero lo cierto es que yo estoy bifurcado ya.
La Biblia tampoco habla de los bifurcados.
Ni el Corán.
Ni el Talmud.
Ni los textos sagrados del hinduismo o del budismo.
Va a ser que soy un precursor.
Yo siempre lo he dicho.
Yo vengo del futuro.
Esto de aquí debe ser una especie de Erasmus galáctico.
Y a mí me ha tocado esta época y este país.
Espero que sea una parte del Erasmus
y que luego me lo compensen como es debido.
O al menos que me den más puntos por penosidad y peligrosidad.
En este planeta siempre me han pasado cosas raras.
Ahora recuerdo que cuando era pequeño siempre dibujaba lo mismo.
Un faro, unas montañas y en medio una especie de mar.
Ahora no sé si se está bifurcando una parte de mi ectoplasma
pero estoy intuyendo una especie de nave que me deposita en ese lugar.
Esa debe ser la explicación.
Por eso año tras año yo dibujaba lo mismo.
Y el sol que parecía un huevo frito, no era un sol, era la nave...
Yo era muy malo dibujando.
Tenía que comprar los dibujos a los amigos terrícolas para aprobar.
No sólo los de dibujo artístico sino también los de dibujo técnico.
Y claro... los compraba a los que tenían mejor nota.
Que venga del futuro no significa que sea tonto.
Pues bien.... los malditos maestros terrícolas me daban un aprobado justo
y si esos dibujos los presentaban sus autores les ponían un sobresaliente.
Es que me enciendo...
Ahora mismo si pudiera bifurcaría a todos esos maestros sinvergüenzas
aunque me temo que será imposible
porque el tiempo ya los habrá bifurcado a casi todos de forma definitiva.
Empiezo a pensar que este Erasmus está durando ya demasiado tiempo.
y eso me hace sospechar que quizá ha ocurrido algo grave en el futuro
y que quizá no pueden venir a rescatarme con la nave de mi universidad.
Quizá soy un ectoplasma sin patria, sin planeta, sin galaxia y sin eternidad.
Quizá mis compañeros, mis amigos y mi familia del futuro no existan ya.
Quizá por eso mi cuerpo cada día me abandona y mi cabeza se quiere fugar.