CALEIDOSCOPOEMAS 11

Así como si nada van pasando las semanas.
Una.
Y otra.
Y otra.
Y otra.
Como si fueran gotas de agua.
Idénticas.
Insípidas.
Incoloras.
Retrocedo en el tiempo.
No mucho.
No quiero hurgar en la herida.
Hace poco más de un par de meses era Navidad.
Desde entonces hasta hoy una gran lluvia de nadas.
No es una queja.
Es una constatación.
Pequeñas anécdotas vestidas de gris.
De vez en cuando un árbol amable.
Una ola cariñosa.
Un sueño loco.
Un espejismo para aliviar el caos.
Un recuerdo que se aleja cabizbajo.
Un latido perdido en los recovecos del pasado.
Y poco más.
Vivir se ha convertido en pasar por los días sin dejar huella.
Ese es mi caso.
Ya sé que no es el caso de algunos de vosotros
a los que siempre les pasan cosas estupendas
para poner en las redes sociales
y hacer ver a los demás que sus vidas son maravillosas.
A mí me parece sospechoso.
Vosotros creéis que los demás se tragan el anzuelo?
Despertad de una vez!!!
Os voy a decir lo que ocurre.
Va a doler.
Pero es lo que hay...
Primero: nadie os cree.
Os ponen comentarios para salir de paso.
Comentarios para quedar bien.
Todos saben que vuestra vida es aburrida y lamentable.
Como la de todos a estas alturas de la vida.
No os da vergüenza querer engañar a los demás?
Qué pretendéis demostrar con esas mentiras que nadie se traga?
Segundo: si os vierais desde fuera os compadeceríais de vosotros mismos.
Qué ocurre en vuestras cabezas para que pretendáis engañarnos?
Escuchad.
No.
Vuestras vidas no son maravillosas ni divertidas.
Son como la de cualquier otro aunque peores por vuestro miedo a reconocerlo.
Cada día tenéis que inventar una patraña para enmascarar vuestro desastre.
Tercero: hay solución.
Esa es la buena noticia.
Dejad de leerme ahora mismo.
Y marcar el teléfono del centro sanitario más cercano.
Pedid hora urgente con el responsable del área psiquiátrica.
Y hasta que llegue el día de la visita escribid en un papel el resumen de vuestra farsa.
Y luego se lo entregáis al médico que corresponda.
Quizá si no es demasiado tarde entre las pastillas y la terapia podáis curaros.
Pero no lo haréis porque sois casi perfectos y sabéis de todo y tenéis una vida genial.
Perdón, es que no puedo más: jajajajajaajajaja.
Ya está.
Sigo.
Cuarto: No os preocupéis si la ciencia médica no os puede curar.
Tendremos piedad.
Seguiremos disimulando para que estéis muy contentos.
Y os diremos que sois muy afortunados en la vida por estar siempre tan alegres.
Y que sois la envidia de muchísima gente por pasarlo tan bien todos los días del año.
Y además no nos veréis cuando os leemos mientras suspiramos de pena por vosotros.
Así que nunca sabréis la lástima que dais en realidad y podréis seguir con vuestro teatro.
Y a otra cosa mariposa.
Leo lo anterior y compruebo una vez más que yo debería haber sido diplomático.
En pocos años de trabajo hubiera logrado que el mundo entero estuviera en guerra.
Y con suerte en unos años más los humanos ya habríamos desaparecido.
En fin... el planeta me ha desperdiciado y por lo tanto lo pagará caro: perecerá.
A por otra mariposa.
Yo sé de una que me lee comiendo ganchitos y porquerías similares.
Dice que le gustan mucho los caleidoscopoemas.
Que la tristeza está más diluida al combinarla con el humor y bla bla bla...
Y que no puede parar de comer chucherías de esas mientras me lee.
Haría bien en limpiar los mails antes de enviármelos pues llegan con manchas de ganchitos.
Y con olor a cortezas.
No quiero ni pensar cómo debe tener la casa...
Ganchitos y cortezas de los baratos, todo hay que decirlo.
No sé si darle las gracias o llevarla de la oreja a un centro psiquiátrico para que se la queden.
Aunque creo que en el psiquiátrico no se la quedarían... acabaría con ellos en una semana.
Tiene más peligro que un mono ebrio con una cuchilla en una guardería.
Escucha:
Das miedo.
Das ternura.
Das.... nada más.
Tacaña de alma.
Tacaña de ilusiones.
Lo siento pero alguien tenía que decírtelo.
Seguro que ahora te has comido diez ganchitos de golpe... hala, que aproveche!!!
Vuelvo al principio.
Yo no miento.
No pasa nada semana tras semana.
Encefalograma plano de la vida con tendencia brutal e inevitable a la insignificancia.
Desde hace mucho los años dan vueltas y vueltas en la noria del tiempo cansado y viejo.
Las cuatro estaciones.
Navidad.
Vacaciones.
Semana Santa.
Que si frío.
Que si calor.
Que si el gobierno.
Que si la oposición.
Y así nos tienen entretenidos durante todo el año.
Y no los critico.
Hacen bien en distraernos.
Con todo eso, con el fútbol, con las banderas, con la crisis, con los rumores, etc...
La realidad ahora resulta insoportable.
Duele mucho.
Y nos la enmascaran.
Porque ya no importamos.
Porque nuestro futuro es deprimente y oscuro.
Porque para el poder no valemos mucho, valemos poco, valemos casi nada.
Y además somos tristes sombras cansadas de lo que fuimos.
Fantasmas de otro tiempo que ya desapareció.
Trozos de vidas devastadas que el viento zarandea sin contemplaciones.
Retales de nombres y latidos esparcidos por los días.
Innumerables restos de sueños que un día se estrellaron contra el muro de la realidad.
Mejor que nos distraigan.
Con lo que sea.
Venga, la última mariposa.
La mariposa que se escapó de la Biblia Salvaje
y revolotea entre amarillos y azules por los confines del tiempo.
Arrodillaros.
Los que podáis, claro.
Beso la Rosa.
Beso la Luz.
Beso la Vida.
Beso también la Noche Cruel.
Voy a rezar por todos.
A mi Dios.
Que soy yo, claro.
Rezo por los cuerdos.
Y por los locos.
Por los sinceros.
Y por los mentirosos.
Por los valientes.
Y por los que se asustan.
Por los que aman.
Y por los que odian.
Por los que aceptan la realidad.
Y por los excelentísimos marqueses de las redes sociales.
Rezo por todos.
Hasta por la de los ganchitos y las cortezas.
Aunque esta me temo que es propiedad del Diablo.
Vade Retro Miss Ganchitos!!!
Vade Retro Miss Cortezas!!!
Y os absuelvo.
A todos.
Y gratis.
Hala, ya podéis ir a jugar.
Pero antes debéis cumplir una penitencia.
Id ahora mismo al espejo y pediros perdón.
Por lo que le habéis hecho a todos vuestros ilusionados pasados.
Y a partir de hoy dad preferencia a la verdad, al coraje y al corazón.
Ya está.
Daros las manos unos a otros.
Podéis iros en paz...
Que cuando llegue el momento la eternidad nos acoja maternalmente entre su infinita nada.
Palabra de Dios.
Palabra de Toro Salvaje.
Amén.