Justiniano sigue sin encontrar empleo
y lo peor es que todos los trabajos
están muy mal pagados
para el tipo de vida que le gustaría tener
por eso hoy ha decidido
dar un giro definitivo a su existencia
y tras comprarse
una corona de cartón dorado
en la tienda de los chinos
se ha autoproclamado
rey de este país
con el nombre de Justiniano I
y a partir de ahora
va a darse la gran vida
disfrutando del sacrificio
de la gente humilde de su reino
que además
como si fueran retrasados
vaya donde vaya
le vitorearán agitando las banderitas.
Fecha y hora de publicación.
ResponderEliminarMe temo que el puesto de rey está ocupado por un sinverguenza que no creo que se lo deje.
ResponderEliminarBesos