Noche bendita.
Duermo de un tirón.
Despierto.
Canta la vida
una hermosa canción.
El cielo bosteza azulado.
El silencio se va a dormir.
Un pétalo de luna se despide.
Cualquier día la invito a bailar.
Doy una palmada.
Todas las horas vienen corriendo.
Son horas risueñas.
Qué guapas están.
Algo intuían estás listillas.
Tú, a leer.
Tú, a escribir.
Tú, a la ducha.
Tú, a desayunar.
Tú y tú al parque.
Vosotras dos: vamos a ir de compras.
Las horas
que no elijo
ponen cara de poco amigas.
Las acaricio mientras les susurro:
Vosotras un poco de paciencia.
El día es largo y dará para mucho más.
qué bonito, me ha encantado. Es un poema cantarín
ResponderEliminarMis horas de esta mañana me miran mosqueadas jaja
Besitosssss
Pues las mias se pasan de pesadas,ninguna me deja dormir!.Besotes!
ResponderEliminarBuenos días toro, esas horas para todos y todos para ellas, con su variedad.
ResponderEliminarLas mías últimamente pasan volando sin darme cuenta.
Estoy de vuelta, espero ser constante, pues el camino lo tengo algo complicado.
Feliz semana.
Un abrazo
Lo que hace dormir bien. Las horas se vuelven de lo más simpáticas.
ResponderEliminarBesos!!
Que estupendo, todas ordenaditas . Te envidio eso de dormir de un tirón. Besos
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