RECORDANDO

De entre los años que ya no son
aparecen los caballos del ayer
galopando por mis recuerdos
y a su paso retumban
las caras conocidas
y los nombres de los muertos
y el cielo se llena de polvo de memoria
hasta tapar el sol y el ahora
y de repente vuelvo a ser pequeño
y todos esos muertos viven otra vez
y se llaman los unos a los otros
y se explican cosas
y ríen entre bromas
como si la muerte no los esperara
y su piel se desarruga
y sus ojos relucen llenos de vida
y yo los miro desde un rincón
asolado por todo lo que no comprendo
y poco a poco los veo desaparecer
entre los brazos de la nada
y me despido de ellos
y el silencio de su respuesta me raja el alma.