SUERTE EN EL 2016!!!

Cada año mueren
sesenta millones de personas.
Os deseo mucha suerte en el 2016!!!

GUAYKU 6

Otro año más.
Miro por la ventana:
La vida llora.

DULCES FIESTAS

Para disfrutar
de estas fiestas
tan dulces
los leones del zoo
han almorzado
un veterinario
relleno de turrón.

MANICOMIO 107

Terremoto Crazy
está celebrando
el día de los inocentes
asestando tres puñaladas
por la espalda
a cualquiera que se cruza con él.

JUSTINIANO 156

Justiniano ha seguido pensando
sobre el origen de tantas riquezas
como las que se veían
en el discurso navideño del Rey
y ha llegado a la conclusión
de que el Rey es musulmán
y que no se lo ha dicho a nadie
y que cuando no lo ven
reza varias veces cada día
arrodillado en dirección a La Meca
y que por eso los jeques del petróleo
le dan mucho dinero y joyas
y desde hoy mismo Justiniano
ha abrazado la fe de Mahoma
y se ha hecho muy amigo
de uno de su barrio que es camello
y va con él a todas partes
y se ha comprado una chilaba blanca
que le sienta como un guante
y cada pocos minutos
se planta delante del espejo
y aunque no sabe nada de árabe
lo está aprendiendo por intuición
y ya habla casi tan bien
como un auténtico árabe saudita:
jalamarlalajaaaaaaaa, lamarlajaalaraaaaa
alamajrlaralajjaaaaaaaa, ralamajarlajaaraaa
larlamalrajalaaaamaa, lajarallamralarjjjaaaaa
y ahora sólo piensa en el fantástico día
en el que los jeques generosos
le regalen su primer palacio de oro y mármol.

JUSTINIANO 155

Justiniano ha visto asombrado
el mensaje navideño del Rey
que dieron anoche por televisión
y se ha quedado con la boca abierta
pues acostumbrado a la miseria
que ve a diario por las calles
y que asola sin piedad
a casi toda la gente que conoce
no imaginaba que su país fuera tan rico
para tener esos palacios tan lujosos
y decorados sin reparar en gastos
como en las películas de los millonarios
y después ha pensado
que para tener todo eso
hay que trabajar mucho como el Rey
y ser de una familia muy honrada
como sin duda es la del Rey
y además que debe ser muy difícil
que la gente te vote cada cuatro años
y ganar siempre las elecciones de Rey
y así ha pasado Justiniano
todo el día de navidad
soñando y suspirando
por tener quizás algún día
la vida de los ricos como el Rey
y comparándola desconsolado
con las penas y tristezas
de los pobres y parados como él
que no tienen ni donde caerse muertos.

JURO QUE ESTABA

Juro que estaba.
Callé aterrado.
No dije nada.
Ni podía
ni tenía palabras.
Pero la sentí.
Estaba la muerte
sentada en una silla
cerca de mi cama.
Yo disimulaba
y hacía ver que dormía.
Ella toda de negro
con un vestido antiguo
y con mirada
de otros lugares
y otros siglos
se levantaba
y paseaba a mi alrededor
y extendía su mano
cada vez más cerca de mi espalda.
Después la retiraba
y se alejaba
y volvía
cada vez más decidida.
cada vez más cercana.
Y yo seguía disimulando.
Y hacía ver que dormía.
Y ella volvía.
Cada vez más altiva.
Cada vez más helada.
Y atrapado en el tiempo
y cuando mi garganta
apenas ya respiraba
de repente grité
y me arranqué de sus garras
y la muerte se hizo ovillo negro
y desapareció de repente
diluyéndose imposible entre la nada.

ATENTOS

Atentos.
Es navidad.
Hay que estar muy atentos.
Que no se os olvide nada.
Hay que comprar regalos para todos.
También para la tía pesada.
Y para el tío alcohólico.
Y para los sobrinos nauseabundos.
Y para la abuela desequilibrada
Y para los cuñados criticones.
Y para las primas neuróticas
Y para el primo sobón.
Y para la cuñada sabelotodo.
Y para los hermanos "Judas".
Y para la pareja que ya no te quiere.
Y para los padres histéricos.
Y para el abuelo dictador.
Y para la sobrina diabólica.
Y para los suegros vampiros.
Y para los hijos insoportables.
Y después hay que envolverlos bien.
Como si fueran
mucho más valiosos
que la porquería que son.
Y entregarlos con una sonrisa.
Una de esas sonrisas falsas
que tanto se usan en navidad.
Y luego hay que seguir bebiendo.
Para olvidar estos putos días.
Y la repugnante familia que te tocó.

DECORACIÓN NAVIDEÑA

El escaparate 
de la tienda
está decorado
con guirnaldas
y bolas navideñas.
La dueña
y los clientes
no.
Siguen siendo
tan cutres
y lamentables
como todo el año.

NAVIDAD BORRACHA

En un bar oscuro
de un barrio perdido
un grupo de borrachos
han celebrado hoy
la navidad
peleándose
y escupiéndose
disfrazados del Espíritu Santo.

DESPIDO EN NAVIDAD

Un ángel rebelde
afiliado a un sindicato
de ángeles que luchan
para reducir la jornada
y por un cielo
justo y solidario
ha sido despedido
y ahora está en el paro
por no querer
hacer horas extras
bajando a la tierra
desde nochebuena
hasta el día
de los Reyes Magos.

SIEMPRE NADA

Cemento.
Metal.
Silencio.
Soledad.
Gris.
Todo gris.
Ir.
Estar.
Volver.
Nada.
Siempre nada.
Salvo la maldita tristeza.
Y un poema llorando en un rincón.

QUEDAR CONTIGO

Me gustaría
quedar contigo
y hablarte con el corazón
y mirarte a los ojos
y acariciar tus manos
y también
invitarte a cenar
y a bailar
y a tomar unas copas
y acompañarte a tu casa
y cuando abrieras la puerta
despedirme muy serio
después de decirte
que no me acuesto con monas.

EL BESO QUE TE BUSCA

Hay un beso
que te busca.
Tú no lo sabes
pero ese beso
te busca
incluso en la sombra
de los sueños
más imposibles.
Cada día
se despierta
acariciando tu nombre
y hora tras hora
te imagina
te sueña
y te busca
hasta que por la noche
vuelve a casa
cansado y sin ti
y se acuesta
como siempre
susurrando tu nombre
en la conmovida almohada.

MANICOMIO 106

Terremoto Crazy
ha decorado
esta noche por sorpresa
el árbol de navidad
del manicomio
gracias al material
que ha obtenido
con gran habilidad
y extraordinaria paciencia
de una docena de locos
a los que previamente ha estrangulado:
12 hígados hinchados
rellenos con dedos
despellejados y sin uñas
96 dientes bañados en sangre
12 narices amoratadas
de las que cuelgan
alargadas mucosidades verdes
24 orejas fritas
12 lenguas abiertas por la mitad
240 uñas con purpurina plateada
48 muelas colgando de lacitos
18 metros cuadrados de piel asada
en la que ha escrito
unos cuantos villancicos satánicos
y 24 aterrorizados ojos
atravesados por un imperdible
colgando cada uno
con mucha gracia
y maravillosa delicadeza
de las entrañables y apetitosas orejas fritas.

ZOMBIS NAVIDEÑOS

Ya luce patética
en todo su esplendor
la navidad de plástico.
Esa guerra loca
que siempre ganan
los esperpentos
y los mamarrachos.
Riadas inmensas
de humanos grotescos
abarrotan tiendas y calles
bajo luces hipnotizadoras
que los guían
como cada año
hacia otra hecatombe más
donde sucumbirán
atiborrados de comida
y devorados por la realidad.
Apenas quedan sombras
y calles sin prostituir
por las que transitar
alejados y a salvo
de las familias monstruosas
porque a todas horas
miles de perturbados
disfrazados estrafalariamente
de ridículos Santa Claus
vigilan como dobermans
que nadie se escape
de la descerebrada manada.
Cada día 
es una batalla
de dignidad
y buen gusto
que hay que ganar
a esos zombis navideños
de mirada perdida
que pululan 
por todas partes
buscando milagros de cartón
entre mentiras de purpurina dorada.

AMOR EN FLOR

Un día
compré una orquídea
blanca y hermosa
como la nieve
pensando en ti.
La traje a casa.
La puse
en un jarrón.
Después
de admirarla
toda la tarde
por la noche
la herví
y la bauticé
con tu nombre.
Y después
te estuve hablando
un par de horas
hasta que me cansé
de tu silencio inexplicable.
Incluso tu cara
arrugada
húmeda
y aséptica
me pareció preocupante.
A la mañana siguiente
con gran enfado
te llevé
a la floristería.
Me pidieron excusas
muy avergonzados
y me devolvieron
el dinero
que por ti había pagado.

LA OVEJA CHUCHI

Ha vuelto
la oveja Chuchi.
Hay más alegría
en el cielo
por una oveja
que vuelve
que por noventa y nueve
que jamás se marcharon.
Yo te bendigo
oveja Chuchi.
Ya puedes sentarte
a mi derecha
y disfrutar
todos los días
de mi maravillosa presencia.

GUAYKU 5

Dónde estarás
luciendo tu tipazo
de mona vieja.

HOY TAMPOCO HAS VENIDO

Hoy tampoco has venido.
Da igual.
Yo tampoco estaba.
Estaban mi cuerpo
y mi ropa
y las garras
de tu recuerdo
arañándome el alma.
Desde que te fuiste
desaparecí para siempre
y de mí
nunca jamás
he vuelto a saber nada.

RETALES DESCOLORIDOS

Me gustan los días de fiesta
entre semana.
Y también los puentes
en mitad
de esas nadas habituales
en las que reinamos.
Nadas cadavéricas
que tan importantes creemos
y que en realidad
a nadie le importan.
Me gustan
porque rompen las rutinas
y nos dejan desnudos
en medio
de una desorientación fascinante.
Y chocamos con las horas.
Y vamos al revés por los días.
Y parecemos
papagayos y cotorras
en una selva
de cemento y humo
rivalizando para ver
quien disfruta más del tiempo libre.
Y todos los escenarios habituales
por los que transitamos
parecen escandalosamente ridículos.
Y uno no sabe si va o viene.
Y en el fondo da lo mismo
porque hace ya demasiado tiempo
que nos convertimos
en retales descoloridos
de una ropa vieja
que se fue deshilachando
y dejó hace mucho de estar de moda.

ENLOQUECEN LAS VIDAS

Enloquecen las vidas.
La gente
no encaja
con el papel
que sus errores
y los años
les han adjudicado
y el caos
de sentimientos
es cruel y devastador.
Los latidos
se balancean
bajo las emociones
ahorcados de pena gris
mientras sus dueños
pasan los días
de farsa en farsa
luciendo máscaras
cada vez más agrietadas.
El amor se fugó
harto de ser ignorado.
Y la dignidad
se pegó un tiro
hace mucho tiempo.
Y aún así la farsa sigue.
Y las vidas
se pudren
en sepulcral silencio.
Y oculto
en un rincón
del tiempo que no fue
el corazón castigado
en esa cárcel diaria
de suspiros amargos
llora todas las noches
lágrimas negras
que jamás nadie seca
y que se pierden en la nada.

UN POEMA VACÍO

Ahora mismo
el poema está vacío.
Un inmenso blanco
de nieve
es todo lo que hay.
Pero yo pongo un guacamayo
con más colores
que el arco iris
en la rama de un árbol
y aparecen montones de niños
señalándolo con el dedo
mientras en sus caras
se dibujan
unas sonrisas magníficas.
Y pongo también
una mujer elegante
que camina por la calle
luciendo un vestido azul
bajo una sombrilla de seda roja.
Y se desata la locura.
Aparecen hombres boquiabiertos
que se quedan mirando
cuando ella pasa
con cara de auténticos bobos.
Y entonces pongo un pobre
pidiendo limosna
en una esquina perdida del poema.
Y no pasa nada.
El guacamayo sigue deslumbrando.
Los niños lo señalan
cada vez más nerviosos
y se pelean por capturarlo.
La mujer elegante
sigue caminando
por el centro del poema
como si el mundo le perteneciera.
Los hombres continúan atontados.
Y el pobre
solo y olvidado
va desfalleciendo lentamente
en una discriminada esquina del poema.
Este mundo no tiene remedio.
Hasta los versos
son terriblemente insolidarios
con todos aquellos que no tienen nada.

ESTREMECEDOR

El silencio
de hoy
es estremecedor.
Estoy muerto.
Estamos muertos.
Sólo falta
que alguien
se haga cargo
de nuestros cuerpos.

DANDO VUELTAS

Presos
de nosotros mismos
giramos
y giramos
día tras día
dando vueltas
alrededor
de la misma nada.

GUAYKU 4

El perro tuerto
lame la dulce luna
del sucio charco.

CON LOS OJOS DEL CORAZÓN

Sé muy bien
que mis tristezas
morirán conmigo
y que un día
mis sentimientos
por fin descansarán
y que el sol
seguirá saliendo
y que nacerán niños
y que sus padres
sonreirán embelesados
cuando los abracen
y que la gente
se enamorará
y se besará
bajo los árboles de los parques
y que habrá días grises
en cada vida
y después días alegres
que los borrarán
y que los poetas
seguirán escribiendo
compartiendo sus latidos
con el resto de la humanidad
y que el mundo seguirá girando
en su órbita de emociones
y que cada uno
de los que pasamos por él
dejaremos huellas
en otros que nos conocieron
y que siempre habrá
hasta el fin de los tiempos
alguna buena gente
que mire
y sienta la vida
con los ojos del corazón.

DESMORONAMIENTO

Un día triste
comprendes
roto
y desolado
que la vida
se te cae
a pedazos
por todas partes.

MUY DESAGRADABLE

El trabajo de la muerte
es muy desagradable
por culpa de esos vivos
que aterrados 
se resisten
chillando y pataleando.

ACOSTUMBRADO

Me he acostumbrado
al silencio 
de las lágrimas
que se despeñan 
hacia dentro
salpicando estremecidas
todo lo que yo siento.

UN DÍA AZUL

Ella tiene
dos girasoles mágicos
en lugar de ojos
y su boca
es un hotel
donde mis besos
se alojarían de por vida.
Tiene también
una sonrisa traviesa
que hace reír a mi corazón
cada vez que sueña
jugar con el suyo
a que siempre juegan.
Ella reina
en un mundo
de magia infinita
que todavía desconozco
pero sé bien
cada vez que la sueño
que un día azul
nos encontraremos
y cuando eso suceda
le regalaré un sol
y un ramo de palabras
que la abrazarán y besarán entera.
Y ella se emocionará.
Y me llevará de la mano
a un mundo hermoso
donde nos convertiremos
en dos besos entusiasmados
que cantan, ríen y vuelan
y que al final del día
mirándose a los ojos
silban juntos
una canción de amor
que besará a la noche
ruborizará a la luna
y hará suspirar a las estrellas.

LA PATACHULA

Tenía catorce años tímidos
cuando una chica
me sacó a bailar.
Yo no sabía.
Nunca había bailado.
Era una canción lenta.
Luego vinieron muchas más.
Era la noche mágica
de la verbena de San Juan.
Ella era el terror del barrio.
Le llamaban la Patachula.
Era temible.
Era coja.
Tenía muy mal genio.
Y aquella noche 
le apetecía bailar.
Fue una noche de hace mucho.
Fue una noche para no olvidar.

JUSTINIANO 154

Justiniano tuvo un flechazo
cuando vio a la nueva dependienta
de la pescadería de su barrio
y desde entonces
sólo piensa en ella
y ayer ya no pudo más
y fue a la pescadería
y compró una sardina
y se presentó
y le preguntó su nombre
y le prometió un poema
y se despidió
guiñándole un ojo
y lanzándole besitos
y desde esta madrugada
- escrito con mayúsculas
y pintura verde fosforescente -
el poema de Justiniano
deslumbra como una hermosa
declaración de amor
en la persiana metálica
de la romántica pescadería
donde trabaja su amada:
"ESTEFANÍA YO TE AMO
Y NO ME IMPORTA
QUE PAREZCAS
UNA BOMBONA DE BUTANO,
TE LO DEDICA CON AMOR
TU  GALANTE NOVIO
Y TU FUTURO MARIDO:
EL GRAN POETA JUSTINIANO".

FUGARME DE TODO

Cansancio.
Estoy muy cansado
de convivir con los humanos.
Aún así
viene en mi ayuda
el tiempo compasivo
y me salva
de todas esas fauces
que amenazan con devorarme.
Vuelan los tiempos
alejándome
de todos los reproches
que intentan ahorcarme
y convertirme en su esclavo.
Vuelan los tiempos
y me rescatan
con matemática
y justa misericordia
de todo ese miserable barro.
Y les doy las gracias.
Y los besaría cada día.
Y los besaría cada noche.
Necesito vacíos de nombres y de tiempos.
Necesito un agujero por donde escapar
de tantas bocas egoístas
rebosantes de descalabros.
Yo quiero fugarme de todo 
y empezar de nuevo.
Con otro nombre
y con la mirada inmaculada.
Empezar desde el tiempo de mi primer ancestro
y perpetuarme entre los árboles y el cielo.
Quiero bailar con la luna
y besarla las noches de lluvia
cuando aparezca mojada de latidos y deseos.
Quiero fugarme con las piezas del ajedrez
y aparecer en otro tablero
en la punta más infinita del desconocido universo
y jugar una partida de hielo con la muerte.
Y ganarle.
Y engañarla.
Y matarla.
Y saltar de alegría entre las auroras boreales
y abrazar a los planetas sin dueño
y cantar boleros en las noches eternas
a las estrellas más sensibles del firmamento.
Y quiero despertarme en los brazos
de la niebla estelar
más dulce y amorosa
y que me acaricie las penas
y que me arrulle los sentimientos
y que antes de morirme
y formar parte
de la eternidad del universo
me susurre en el oído
el secreto tan bien guardado
de todas las cosas y de todos los tiempos.

MÁGICA

Y vuelas mágica
con alas
de besos
y dulces sueños
entre mis latidos
y mis poemas
como un hada
de hermoso cuento.

SAN MONO Y SANTA MONA

Fin de semana.
San Mono y Santa Mona
celebran chillando
con histérica alegría
su onomástica semanal.
Fin de semana.
Todos los monos
están de fiesta.
Casi tres días
para engañarse
con cualquier idiotez
y jugar unas horas
a que la vida es bella.
Venga monos.
Todos a jugar.
A comprar.
Al cine.
A pasear.
A cenar.
Al teatro.
A salir.
A beber.
A olvidar
por un rato
las vidas de mierda.

CORAZÓN CÓSMICO

Cada noche un poema.
Y una luna
por llegar
cariñosa y tierna.
Besos
de palabras
y versos
de tiempo
que laten
en mis estrellas.
Estrellas de corazón cósmico.
Estrellas de agua, luz y tierra.
Estrellas de hielo
que alumbran
penas y tristezas.
Estrellas de fuego
que a veces
vienen y me besan.
Estrellas ciegas
que transcurren
entre nubes
de alma oscura
y destellos
de un ayer
que fue planetario
y que cada día se aleja.
Miles de estrellas
de corazón cósmico
en mi soledad eterna.
Estrellas de cristal.
Estrellas de besos.
Estrellas de poemas.
Y de vez en cuando
alguna noche
aparece hermosa
la luna blanca
de corazón azul
susurrando radiante
ecos de sueños
y resplandores
que dormido me besan.
Y miro el universo
y le pregunto
si falta mucho
para que esa luna
de caricias eternas
venga a rescatarme
y me bese
y me abrace
y para siempre me quiera.

ME HAN TRASPAPELADO

Estoy convencido
de que alguien
queriendo
o sin querer
me ha traspapelado.
No sé si es un error
o hay motivos
que prefiero no imaginar.
Mi expediente
con mi pasado
mi presente
y mi futuro
debería estar
en algún sitio
y en algún tiempo.
Y no lo está.
Mi pasado ha desaparecido.
Me presente es una nada gris.
Y mi futuro se ha fugado.
Ahora soy nada.
Y aquí estoy.
Sobreviviendo los días
entre nieblas y vacíos
mientras espero
que alguien me encuentre.

SE ACERCA EL FRÍO

Se acerca el frío
galopando por los días.
Preparo el confeti
y las serpentinas
para darle la bienvenida.
Mientras tanto
el sol llora
en una esquina del cielo.
El mar tiembla
gris y apenado
abrazado a sus olas.
Y el viento
ha ido a su casa
en busca
de guantes y bufanda.
En silencio profundo
los últimos insectos
se despiden
de familiares y amigos.
A la luz de la luna
la noche suspira feliz
paseando sola
por calles 
y plaza vacías.
Y yo entono
a todas horas
el himno de la alegría.

MATAR O MORIR

Se nos ha llenado la vida
de monstruos 
y de muerte.
Ahora los días
son más inciertos que nunca
y todos los horizontes
están pintados de horror
y desesperanzas.
Sangre
dolor
y fuego
se atisban por el horizonte.
Las palabras
no parecen ser suficientes.
Matar o morir.
Ese parece ser
el tiempo que ha de venir.
Ojalá que el futuro nos sea propicio.

UN MUNDO DE PLÁSTICO Y NADA

Escucho maravillado
el silencio
de los días de fiesta.
Es un silencio
de tumba olvidada.
El teléfono
me mira rabioso
de vez en cuando
y bosteza inútil
en la esquina deshabitada
de un mundo
al que ya no pertenezco.
Las horas
caminan ligeras
para no hacer ruido
y les agradezco infinito
su deambular invisible y etéreo
por el tiempo que me rodea.
Miro mi corazón
y los latidos
avanzan mudos
y serenos
hacia el país
de los muertos
como si fueran samurais
antes de hacerse el harakiri.
No lo voy a negar.
Me seduce esta decadencia
que últimamente
me abraza
por donde quiera que voy.
Hago un último intento
y miro afuera.
Es inútil.
Tras la ventana
hay un mundo
de plástico y nada
ridículamente maquillado
con luces intermitentes
y promesas coloreadas
que a mí ya no me interesa.

OFRENDA

Es otoño.
Y hace mucho calor.
Un calor sucio y pegajoso.
Voy a sacrificar
unos cuantos blogueros
y los ofrendaré
a los Dioses
para que se apiaden
de mí
y bajen las temperaturas.

HACIA NINGÚN SITIO

Este tiempo de ahora
es un tiempo
que no me pertenece.
Es un tiempo
que no lleva mi nombre.
Tiempo vacío.
Tiempo derrotado.
Cada mañana
abro los días
y contemplo
mis horas temblando.
Después las transcurro
y voy dejando
sombras de nada
a mi paso.
Los vivos no me ven.
Los muertos
me hablan
de vez en cuando.
En mis ojos
calla la vida.
En mi boca
silencio de esparto.
Pasan las horas
pasan los días
pasa la vida
y muy cansados
mis huesos y yo
hacia ningún sitio
seguimos caminando.

OBRA BENÉFICA

No tengo ganas
de escribir poemas.
No tengo ganas
de hacer
lo mismo de siempre.
Hoy me gustaría
hacer una obra benéfica
y ayudar
a que esos
que están tan solos
se sientan acompañados
y no tengan tanta tristeza.
Hoy desenterraría muertos
y los repartiría
con una camioneta
de forma aleatoria
por cientos de viviendas.
Llamaría a la puerta
y cuando abrieran
les regalaría
a los afortunados
un fantástico muerto
con mil gusanos
desfilando por las vértebras.
Hoy me gustaría ser
el cartero de la muerte
y sin descanso
ir regalando difuntos
por toda la ciudad
para que los vivos
durante unos días
de forma solidaria
y con todo su amor
besen
abracen
y acaricien
huesos, gusanos y calaveras.

OJOS BOQUIABIERTOS

Tuve una novia
que era muy guapa
un poco tímida
y bastante testaruda.
Una tarde de domingo
discutimos por alguna tontería
que ahora no recuerdo.
Y me dijo algo que no me gustó.
Algo injusto e inmerecido.
La levanté en el aire
caminé unos metros
con ella entre mis brazos
y la deposité
con mucho cariño
a pesar de sus pataleos
dentro de un contenedor de basura.
Aún recuerdo sus ojos incrédulos
rodeados de desperdicios
mirándome boquiabiertos
con un brillo que jamás olvidaré.
Nunca escribiré un poema
de amor apasionado
tan expresivo y gráfico como aquél.

POESÍA LOCA 4

Me ha llamado Cristóbal Colón.
Y me ha pedido ayuda.
Su caso no es fácil.
Le dieron por muerto hace más de 500 años.
Y él pasó del tema.
Se dedicó a procrear y procrear en su isla secreta.
Y se olvidó de todo y de todos.
Y ahora que ya se siente mayor
y que intuye que la muerte
puede llegar en cualquier momento
ha decidido arreglar sus cosas
para que sus herederos
- unas trescientas mil personas -
no tengan que perder el tiempo en litigios innecesarios.
Y he prometido ayudarle.
Y he hablado con los Reyes Católicos
que están pasando por algo semejante
y que todavía hoy
viven escondidos en unas cuevas de Granada
sin ningún tipo de lujos
ni tampoco lacayos que les sirvan
ya que todos han muerto cuando les correspondía.
Y se han puesto muy contentos.
Y si no fuera porque están envueltos en telarañas
y sus huesos no están para alegrías
creo que se habrían puesto a bailar
y a dar volteretas como dos chimpancés de circo.
Y tienen tanta felicidad
que me han regalado sus coronas
para que las venda
y con el dinero que saque
haga las gestiones necesarias
para que ayude a su amigo Cristobalito
en todo lo que necesite.
Y me han dicho también
que les haría mucha ilusión 
que su Cristobalito  fuera a verlos
para despedirse de forma cariñosa
antes de que cualquier día
la perezosa muerte 
decida por fin cumplir con su trabajo.
Y ahora tengo dos coronas.
Y tres chiflados delirando.
Y trescientos mil posibles herederos
que viven en una isla remota y secreta.
Y creo que no voy a hacer nada 
por esos tres tarados
que han logrado burlar al tiempo.
Voy a vender las coronas
y con lo que saque
voy a hacer un fantástico viaje
de muchísimo riesgo y gran valor
para ver si puedo llegar navegando a las Indias.

MUSAS EN DESCOMPOSICIÓN

Abro el cajón de los poemas.
Flores marchitas.
Latidos suicidados.
Corazones agrietados.
Sirenas muertas.
Hadas desaparecidas.
Musas de todo tipo y condición
en diversos estados de deterioro.
No queda nada.
Sus poemas antes tan relucientes
ahora se pudren en silencio
y piensan cada día
en lo ridículo de su absurda existencia.
Yo sigo escribiendo.
Ya para nadie.
No hay musas inmunes al paso del tiempo.
Ahora escribo para las palabras.
Para que no se me pudran en el corazón.
Las arranco con cuidado de mis sentimientos
y luego las coloco lo mejor que puedo
para que con suerte alguien las lea
y no se sientan tan inútiles como yo.
La vida de la gente
no son las palabras
ni tampoco los poemas.
Son la comida y el dinero
los proyectos y los egoísmos
las mentiras y las envidias
las vacaciones y los futuros
el dinero y el porvenir
los sueños y los disparates
la hipocresía y el "yo soy más".
De vez en cuando
abandonan su mundo lamentable
y se disfrazan de musas
y durante un tiempo juegan a sentir.
Pero luego se cansan
y abandonan lo etéreo
y vuelven a lo material y a lo terreno.
Y ya no inspiran a nadie.
Y los poetas
cuando las recuerdan
tienen ganas de pegarse un tiro
y se escapan corriendo
buscando un tren al que arrojarse
y saltan por la ventana
completamente avergonzados
y se comen los poemas que les escribieron.
Esas musas ya no son nada.
Son trozos de carne y huesos
reptando por la vida
y por el barro
que algún día maravilloso
alguien enterrará en alegre silencio.

VOLVIENDO A CASA

Como viejos presos
de una cárcel infinita
salimos del trabajo
y volvemos a casa
arrastrando los pies
por las calles
cansadas y viejas
de la ciudad autista
mi invisibilidad y yo.

JUSTINIANO 153

A Justiniano
le gusta mucho
una cajera morena
del supermercado
que hay en su barrio
y desde hace un mes
cada día va allí
coge una sardina
y se dirige a la caja
en la que trabaja su amor
se pone en la cola
señala a la cajera con el dedo
y con la sardina
haciendo de micrófono
empieza a cantarle
"Love me tender"
moviendo las caderas
como si estuviera poseído
y cuando le toca pagar
va dejando pasar
uno a uno
a todos los clientes
que están detrás suyo
mientras sigue cantando
la misma canción
y moviendo las caderas
cada vez más enamorado
durante todo el turno de ella.

UNA TRAS OTRA

Cada día
vienen las horas.
Llegan
con desgana
y se sientan
en cualquier sombra.
No me hablan.
No me miran.
No me tocan.
Todas me ignoran.
Después se van.
Una tras otra.
Lentas.
Mudas.
Aniquiladoras.

NORUEGO

Me da igual
lo que digan los papeles.
Ya me he cansado
de este país
de bocazas ignorantes
catetos imperiales
y casposos oligofrénicos.
Desde hoy soy noruego.
Desde hoy me llamo:
Tororg Salvajensen.
¡¡¡Viva Odín!!!
¡¡¡Viva Noruega!!!
¡¡¡Vivan los vikingos!!!

LATIDOS EMBELESADOS

Camino por las calles vacías.
La tarde es oscura y bellísima.
Llueve y hace viento.
Las baldosas relucen
como si el mundo fuera nuevo.
Las hojas
bailan divertidas
y alocadas
en el aire
lanzando besos
de tierno adiós
a cualquiera que las mire.
El viento
mece los árboles
como un amante apasionado.
Y la lluvia los besa
y los pone elegantes.
Y yo admiro 
el fascinante espectáculo
con ojos maravillados.
Y pienso que sólo faltas tú
para que esta tarde
de latidos embelesados
sea la más hermosa postal de otoño.

LA CAJA TRISTE

En la sombra helada
de una lápida
yacen huérfanos
mis mejores recuerdos.
Allí enterraron
a la alegría y a la luz.
Allí nacieron las tinieblas.
Allí morí yo.
Desde entonces
un silencio infinito
envuelve y abraza
tu insoportable vacío.
Vacío
que guardo
en una caja triste
llena de ausencia y dolor.
Y cuando como hoy
la abro
y te resucito
y te lloro
un puñado
de lágrimas amargas
sollozan tu nombre
y estrangulan mi corazón.

PIM PAM, PIM PAM, PIM PAM...

Ya vienen los muertos.
Como cada año.
Pim pam, pim pam, pim pam...
Y tal como vienen
en un par de días se irán.
Pim pam, pim pam, pim pam...

EL POBRE PERRO

Después de tropezar
sangra la muerta
al final
de la escalera.
Su perro
la mira
y menea la cola.
Ladra al infinito.
Lame la sangre.
Le muerde una mano.
Le estira de las orejas.
Le pisa los ojos.
Ladra y ladra
sin que nadie venga
y cansado de esperar
el pobre perro
ya no puede más
y mirando a su dueña
con ojos entristecidos
en uno de sus zapatos se mea.

BUSCO ILUSIONES

Busco ilusiones.
Las busco
de día y de noche
hasta debajo de las piedras.
Las busco
en la calle
en los futuros
en los espejismos
y en la cruda realidad
que a diario me atormenta.
Y nada.
Abismos.
Desengaños.
Hielo en el corazón.
Angustia en las venas.
Ni una ilusión
con la que derrotar
a tanta soledad y tristeza.
Y a pesar de todo
aún sueño con ellas
como un perro sin dueño
que le ladra a la luna llena.
Y a pesar de todo
ladrando y soñando
aún espero que algún día
la vida me bese y me quiera.

MIS MUSAS TAN QUERIDAS

Mis musas tan queridas
se han avinagrado
con el paso del tiempo
y ya no son lo que eran
y cada vez
tienen peor carácter
incluso hay días
en los que no me hablan
cuando las admiro
para inspirarme
y al poco rato
sin venir a cuento
me amenazan airadas
con quemarme los poemas
y algunas veces
por insignificancias
que antes
les parecían enternecedoras
ahora no paran
de reprocharme cosas
y sobre todo
cuando en ocasiones
me inspiran otras musas
se ponen verdes y rabiosas
y tienen muchas ganas de matarme.

PALABRAS DESQUICIADAS

Hoy están desquiciadas las palabras.
Desquiciadas, sucias, repulsivas y feas.
Hasta las más bonitas
parecen hoy excrementos de vaca.
Amor tiene mil cicatrices
y las letras plagadas de costras.
A bondad le ha salido un sarpullido.
Sueño ronca como un borracho.
A dulzura le apesta el aliento.
Caricia tiene una espantosa resaca.
Fragancia huele a cadáver de mofeta.
Cariño no para de vomitar.
Luna está infestada de escamas.
Latido escupe a todas horas.
Pasión bebe vino y come ajos
desde hace unos cuantos días.
Beso hace gárgaras con sus letras.
Corazón está completamente meado.
Enamorada tiene sucio el bigote.
Y hasta la inmaculada alma
con sus cuatro letras alucinando
está chutándose heroína en un rincón.

LAS TARDES DE NADA

Son reveladoras
las tardes de nada.
Tienen ventanas
donde asomarse
y contemplar
hora tras hora
la oscura eternidad
y la helada soledad
que nos aguardan.
Tardes estériles
de calles vacías
y latidos sin alma.
Y después
cuando la mirada
ya no aguanta más
uno se aleja
de la cruel ventana
y se deja caer
en un rincón
con todo el peso
de la vida
y de los años
sollozando en la garganta.

LOS ACTORES SON UNOS CERDOS EGOÍSTAS

Veo las películas
y ya no me gustan.
No me gustan
porque ahora sé
que los actores
son unos cerdos egoístas.
Tampoco me gustan
los espectadores
ni las estiradas taquilleras.
Y es que imagino al cámara
que está filmando.
Imagino su contrato basura.
Y su mujer enferma.
Y los dos niños nerviosos
que alborotan toda la casa
y que necesitan un tratamiento
que su salario no permite pagar.
Y la súbita enfermedad
que le obligará a dejar de trabajar.
Y la miseria que poco a poco
se irá haciendo dueña de esas vidas.
Y los reproches.
Y la caída en picado.
Y la tragedia familiar.
Y a los espectadores les dará igual
porque jamás
pensarán en el cámara.
Y a las taquilleras también
porque no pensarán
ni en el cámara
ni en los espectadores.
Y los actores
se olvidarán de él
y seguirán con sus drogas
y ganando mucho dinero
y el día que estén de buen humor
le sonreirán al nuevo cámara
al que aún faltan quince años
para que le detecten un maldito tumor.

ME AVANZAN

Me avanzan
los días
y la gente.
Me avanzan
el mundo
y sus futuros.
Me avanzan
la realidad
y las ilusiones.
Me quedo atrás.
Cansado y roto.
Exiliado de quien fui.
En la sombra de todo.
Abrazado a mis poemas.

MANICOMIO 105

Como medida terapéutica
el primer domingo 
de cada mes
entre chillidos
bofetadas
y empujones
cocinan los locos 
y preparan una paella
de arroz podrido
pieles de ratas
cabezas de gatos
y amarillentos mocos.

PIENSO EN TI CADA DÍA

Pienso en ti cada día
y embellezco 
con tu nombre
todos mis desiertos
y te sueño
de la mano
y de la cintura
en todas partes
y a veces
te doy un beso
lleno de luz
y de imaginación
y por la noche
cuando me duermo
acaricio tu ausencia
entre la almohada
y tu dulce resplandor.

EL PÁRAMO AGRIETADO

Esta tarde desapacible

las penas llueven

desoladas y mustias

desde las nubes otoñales.

Esta tarde han resucitado

entre la hojarasca

del octubre decrépito

todos mis muertos olvidados.

También han aparecido

por los rincones de mi alma

unos cuantos recuerdos melancólicos

que se tambalean tristones

a merced de la lluvia y el viento.

Esta tarde te pienso

y tu nombre imposible

se hace lágrima y silencio.

Esta tarde de otoño

caminando sin rumbo

por el páramo agrietado

donde malvivo

mis ojos son otoño

de una luz que agoniza

de un gris que me abraza

y de un tiempo que se acaba.

NATA

La repugnante nata
flota desafiante
en el vaso de leche
no hay duda
de que el demonio
está en todas partes.

PAJARRACAS

Miro por la ventana
en busca de gaviotas
que surquen el cielo
pero no hay suerte
sólo he visto
a dos pajarracas
espiando la calle
desde sus balcones.

TU MAGIA HERMOSA

Tu magia hermosa
brota infinita
en cada recuerdo
en cada palabra
en cada silencio
de los tiempos
que tuvimos
y en mis latidos
que inmunes
a cualquier lógica
fascinados te atesoran.

LA MUJER VENENO

La mujer veneno
se inoculó
a traición
en mi sangre.
Y me enloqueció.
Y ahora
no hay antídoto
ni conjuro
ni oración que valga.
Estoy condenado
a sufrir y soportar
los sádicos caprichos
de su despiadado corazón.

RESCATADA

Tras un buen rato
hablando
hablando
y hablando
por teléfono
te rescato
de tu inmensa pena
y por fin
oigo tus carcajadas
que se abrazan
con las mías
y ahora
ya no eres ciega
ahora tus ojos
se iluminan
y miran
y ven
y ríen
con el corazón.

BENDITA LLUVIA

Bendita lluvia
que mantienes
a los bichos
en sus casas.

LA OSCURA REALIDAD

Se pudrió la luz
el tiempo
y la flor.
Brotó el hielo
entre la nada
y mostró
el cadáver
de otra ilusión rota.
Una vez más
he enterrado
un bonito sueño
en la oscura realidad.

RAPTO DE AMOR

En una calle
poco frecuentada
del viejo cementerio
hay una muerta
a la que me gustaría conocer.
Se llama Eloísa.
Un retrato amarillento
dice que es muy guapa.
También es muy tímida.
Ahora debe tener
unos doscientos quince años
y jamás cuenta nada
de como fue su vida.
Es muy discreta y callada.
Nunca ríe.
Nunca canta.
Nunca baila.
Y por lo que parece murió joven.
Y dejó a mucha gente apenada.
Cualquier día de estos
la rapto
y nos vamos
toda la noche de fiesta.
Por supuesto las copas las pago yo.

EN EL ANDÉN

Estoy en el andén
de los años
que se acaban.
Todos los trenes
que pasan
van a vías muertas.
La estación
pintada de nostalgia
y melancolía
sólo es visitada
por el polvo y el viento.
No llevo encima
más que una maleta
de viejos recuerdos
que lloran en silencio.
Cansado
olvidado
y resignado
me siento 
en un banco
mientras espero el tren
que cualquier día
me llevará al final de todo.

MÚSICA, CORAZÓN Y POEMA

Oigo la música
y suena el poema
en mi pecho
antes de que lo escriba.
Danza, late y vuela
en cada nota
de esta sinfonía
que me acompaña
como si fuera
el hermoso corazón
de una bailarina apasionada.
Y yo lo escribo.
Y yo lo beso.
Y yo lo enciendo.
Y ya no hay muros
ni oscuras fronteras
que puedan contenerme.
Ahora soy yo el que suena.
Ahora soy yo el que late y baila.
Ahora soy yo el que es puro fuego.

CARNE DE CEMENTERIO

Carne de cementerio
cenizas en potencia
huesos y poco más
que alguien me diga
por qué tanta vanidad.

LA JAULA DE LAS LOCAS

Para matar el aburrimiento
esta tarde he ido
al desván de los recuerdos
y he estado buscando novias.
Están todas revueltas
y continúan hablando sin parar
y los recuerdos protestan
muy enfadados y alborotados.
Tienen todas los nombres cambiados.
Y también las caras.
Se han intercambiado
la ropa
los pechos
las bocas
las estaturas
y los peinados.
Y ya no conozco a ninguna.
Las flacas están rellenas.
Y las rellenas parecen anchoas arrugadas.
Las tímidas gritan como posesas.
Y las atrevidas tienen la lengua gastada.
Las enamoradizas están avinagradas.
Y las de mal carácter ahora lo tienen peor.
Las que bailaban conmigo
se han colado
en recuerdos de ir al cine.
Las que venían al baloncesto
ahora bailan lentos todas las tardes.
Las que querían pasear
ahora intentan darme patadas.
Las que me invitaban a su casa
cuando sus padres se iban
ahora me dan portazos en las narices.
Las que me esperaban
a la salida del trabajo
ahora me despedirían si pudieran.
Las que no me esperaban
ahora me ahorcarían si pudieran.
Las que estaban casadas 
ahora están divorciadas.
Y las solteras 
ahora son madres aburridas.
Las sexualmente voraces
ya no tienen dientes.
Y las otras mejor no preguntar.
Las formales van medio desnudas.
Las que no lo eran van desnudas del todo.
Las que eran mayores que yo
ahora son brujas peligrosas.
Las otras también.
Las que me querían de verdad
ahora no quieren ni verme.
Las otras tampoco.
He intentado razonar con ellas
pero en eso no ha cambiado nada
y han empezado a recriminarme
mil quejas interminables.
sobre mi comportamiento inadmisible
o sea que he desistido al momento.
Y cuando se han despistado
he ido retrocediendo sigilosamente
hacia la realidad del ahora
y de un portazo he cerrado la memoria
y me he jurado a mí mismo
no volver nunca más a esa jaula de locas.

PURA BELLEZA

De la tarde enamorada
brotan latidos
de pura belleza
en cada silencio
que lleva tu nombre
y sobre cada eco
de esos dulces silencios
cabalgan mis sueños
buscando día y noche
el hermoso beso de tu luz.

DOMINGOS OTOÑALES

Qué hermosos son
los domingos otoñales
paseando en familia
con los niños enloquecidos
por el viento airado
correteando por todas partes
como ratas trastornadas
sin educación
ni nada que se le parezca
mientras sus padres alelados
con la mirada perdida
por otro fin de semana podrido
de sus vidas desperdiciadas
consultan el teléfono móvil
con la inútil esperanza
de encontrar un vídeo
o un whatsapp salvador
que les arranque un rato
de su insoportable y cruel realidad.

LA ANTICRISTA

El terror
de los terrores
viene a Barcelona.
Y quiere verme.
Es la Anticrista.
Tengo mucho miedo.
Como sea
he de protegerme
de su temible presencia.
Desde hoy
rezaré tres veces al día
a todos los santos
y por si acaso
también lo haré
bien arrodillado
en dirección a La Meca
y a Buda
le pondré incienso
y al Conde Drácula
le ofreceré
medio litro de sangre
y a los planetas
del universo entero
les regalaré
órbitas de colores
y como plegaria final
a los dioses
de todas las religiones
les ofrendaré
una tortilla de patatas
para ver si entre todos
consiguen librarme
del temible abrazo
de la Anticrista infernal.

YO TUVE SOL

Yo tuve sol
durante años.
Después me nublé.
Y me hice catástrofe.
Ahora camino
por los bordes
de la locura
abrazando tristezas
y terribles desengaños.
Y algunas noches
de corazón roto
si las tinieblas
me dan un respiro
hablo un rato
con mis muertos
cuando vienen a verme.

LA PÁGINA AGRADECIDA

A veces como hace un rato
sueño con un milagro
que lo pondrá todo al revés
y me encumbrará
a lo más alto
de mi dislocada biografía
y entonces la justicia
de todos mis tiempos
entrará por la puerta
vestida de diosa
y me dará un abrazo risueño
y me pedirá perdón
por todos los vaivenes
que sacudieron mis días
y en mi teléfono
volveré a oír las voces
de aquellos que me querían
y todos los que desaparecieron
querrán volver a verme
y hasta mis enemigos
se disculparán muy arrepentidos
por todo el daño que me hicieron
y después dejo de soñar
y miro mi teléfono muerto
y miro la puerta quieta y llorosa
y nadie quiere volver a verme
y sólo esta pagina en blanco
que voy llenando
con versos entristecidos
me mira de vez en cuando
agradecida por haberle dado vida.

ASILO POLÍTICO

Está el día destartalado.
Día de lluvia fea
y charcos anoréxicos.
Zombis con paraguas
pululan por las calles
amenazando sin descanso
a los ojos despistados.
Tengo la sensación
de que el mundo
es más idiota cada día.
Quizás nos ponen algo en el agua
o envenenan el aire
o lo más probable
la telebasura esté acabando
con cualquier signo de inteligencia.
Entre la lluvia sucia
los charcos raquíticos
y los humanos descerebrados
da asco y miedo estar en la calle.
He decidido volver a casa.
Y pedirme asilo político a mí mismo.
Y concedérmelo.
Y obtener la nacionalidad extraterrestre.
Y renunciar una vez más
a toda esta basura que me ofrece la Tierra.

SUEÑOS DE AMOR

Se van yendo
los sueños
en silencio ciego
con las sombras
de los nombres
que un día
relucían en la boca.
Por no dejar
no dejan ni vacíos.
Son latidos imposibles
zurcidos de hastíos
que mueren
fusilados por el tiempo
con absoluta indiferencia.
Espejismos de nadas
para engañar
a ese pobre corazón
tan roto
tan viejo
tan cansado
que ya no canta
que ya no siente
y que ya hace mucho
que de tristeza se marchitó.

MANICOMIO 104

Terremoto Crazy
ha celebrado
la llegada del otoño
al manicomio
con una maravillosa fiesta
en la que ha atado
a montones de locos
en las ramas de los árboles
y poco a poco
ha ido cortando las cuerdas
y los ha dejado caer
como si fueran hojas muertas
de un inesperado y magnífico vendaval.

UN BESO DE OTOÑO

Hay un beso de otoño
en cada hora
que se pierde
por las calles atardecidas.
Los días
cansados
las dejan caer
como si fueran hojas
acariciadas de nostalgia.
Es el tiempo
de los recuerdos
que amarillean
en latidos que no volverán.
Y yo los añoro
y camino
por los ayeres
buscando ecos
de tiempos felices
y no encuentro a nadie.
Sólo me acompañan
las  amables horas
que emocionadas
van diciéndome adiós
como si fueran
tiernas lágrimas del tiempo.

TORMENTA

A menudo
me hago verso
me hago poema
y refugiado
entre las palabras
espero que pase la tormenta.

EL AQUELARRE SEMANAL

Fin de semana
en la ciudad muerta.
Fin de semana
en la ciudad podrida.
Fin de semana
en la ciudad del horror.
Las brujas se acicalan
camuflan sus canas
y afilan sus uñas de halcón.
Los monstruos
carneros viejos
de sucio pelaje
y más tontos que un zapato
salen de caza
escondiendo el barrigón.
Ellas y ellos
juegan aburridos
al amor que se pudrió.
Lo patético
y lo insoportable
se viste de fiesta
y observarlos
produce un inmenso dolor.
Es el aquelarre semanal
de los cadáveres
que no se resignan
y arrastran
por cualquier antro
su lastimosa condición.
Y yo tampoco me libraré
caeré muerto una vez más
como víctima
de una extraña fascinación
en cualquier cementerio
de luces sórdidas
papadas explosivas
y maldito alcohol de garrafón.
Rodeado de zombis
achacosos y deprimentes
que se contonean
al ritmo cansino
de una música arrugada
y de cerebros en descomposición.

PÉTALOS DE NADA

Hace mucho
que no te veo.
Hace mucho
que no sé nada de ti.
Hace mucho
que sin ti muero.
Tus vacíos
se dibujan en mis días
como si fueran
un engaño del tiempo.
Y mientras tanto
tu nombre
vive feliz
en mi boca melancólica.
A veces
te pienso
al volver cualquier esquina.
Y cierro los ojos
y te imagino
caminando hacia mí.
Y los abro.
Y siempre está
tu impecable vacío.
Hasta tus ausencias
son elegantes
y hermosas
como bellos pétalos de nada.
Será que tu magia
adorna con flores
de memoria amarga
todas las dimensiones
en las que late mi corazón.

CORAZÓN Y TIEMPO

En un rincón del tiempo
y perdidos
en el universo
de las vidas que viví
agonizan todos los que fui.
En su corazón
atesoran mis risas
guardan mis recuerdos
y cargan con mis lágrimas.
Y desde
su casi adiós
se apenan infinito
cuando la tristeza
me devora el alma.
Y quisiera hablarles
y decirles
que los echo de menos.
Que soy ahora
la suma de sus vidas
y el eco gris
de sus añorados latidos.
Que cada día
los recuerdo
con emocionado cariño.
Pero ya no me escuchan.
Están rotos.
Malheridos de vivir.
Casi ni laten.
Son estrellas fugaces
de los tiempos
que un día habité
apagándose en la nada.
Y ahora
sólo esperan
que yo fallezca
para por fin morir
y todos juntos
descansar en paz
en la silenciosa eternidad.

CORDURA

Ya estaban
tus besos
y los míos
a punto
de caramelo
pero vino
la cordura
amenazando
chillando
y rugiendo
como una loca
y nos los robó.

PSICÓPATA 33

Me gusta asistir
a las reuniones
de alcohólicos anónimos
y cuando beben
ese café aborrecible
entre temblores
y escalofríos
les guiño un ojo
y les enseño sonriendo
una maravillosa botella de whisky.

BASTÓN

Me dicen que escriba 

cosas muy alegres

con sonrisas

campanas y confeti

pero no puedo

antes debería

arrancarme los ojos

y cambiarlos por un bastón.

LLUEVEN MIEDOS

La vida
se va apagando
y ahora
llueven miedos
por todas partes.
Somos declives
que se resisten
con uñas y dientes
a ejercer de muertos.
Vivir así
es un sinvivir.
Es un arrastrarse
por el barro del tiempo.
Dura condena
la que nos toca
sufrir ahora
hasta el día
en que por fin
la muerte nos libere.

PARA LA MALQUERIDA

La Malque es un corazón

de sol escondido

y  mil silencios largos.

Es beso de agua

y luz de ciegos

en el desierto diario.

La leo y me leo.

La leo y la siento.

La leo y la quiero.

Vamos de la mano

desconocidos

y alejados

por los caminos 

rotos y astillados

de la vida cansada

y del tiempo huraño.

Refunfuñamos por todo

y hasta en el infierno

tienen miedo

de que  un día aciago

lleguen nuestros pasos.

Chocamos con mil horas

arañamos las rutinas

odiamos la compasión

nos dan risa los ángeles

y mucha pena los diablos.

Nos cansa todo

y más que nada

el resto de los humanos.

A veces herviríamos

a los que nos rodean

y otras daríamos la vida

por hacer reír a un chavo.

La Malque es un corazón

de sol escondido

y mil silencios largos.

SIN CONSUELO ALGUNO

Murió su padre

y ella lloró

todos los mares.

Ahora cada noche

lo sueña

y en cada sueño

él vuelve a morir

y ella

dormida

y despierta

sigue llorando

sin consuelo alguno.

HECATOMBE

Escribo en la hecatombe
de otra mañana
que me despierta para nada.
Como cada día
mis pasos me llevarán
al cementerio cotidiano
donde el aire está enrarecido
los muertos
mienten más que hablan
y sin reparos
fingen a diario
que la vida ríe y canta.
Y pasarán las horas
mientras transcurro
entre decorados ajados
lenguas hipócritas
y tiempos nauseabundos.
Después volveré
a mi tumba tan precoz
y cuando anochezca
volveré a morirme
durante unas benditas horas.

REPUGNANCIA

Ni los de aquí.
Ni los de allí.
Me repugnan todos.

EL MAGO LOCO 11

El mago loco ha sido contratado
para actuar en el cumpleaños
del hijo pequeño
de una familia muy adinerada
que vive en un ático muy lujoso
y aunque el padre del niño
le ha pagado
la mitad de lo acordado
el mago loco ha decidido actuar
para no disgustar al niño
en el día que cumplía siete años
ni defraudar tampoco
a los numerosos invitados
que esperaban su actuación
y tras realizar varios trucos
durante más de una hora
ha apagado las luces del salón
y ha pedido silencio absoluto
para poder concentrarse mejor
en el truco estrella de su repertorio
y ha empezado a entonar
unos interminables
y misteriosos conjuros mágicos
mientras encendía 
unas velas de incienso
que ha colocado en el suelo
formando un gran triángulo iluminado
y después ha pedido a todos
que entornaran los ojos lentamente
y que se relajaran
y de repente
cuando todo el salón
era paz y silencio
ha agarrado al padre del cuello
le ha arrancado un ojo
le ha mordido la nariz
le ha arañado la cara
y con un mágico empujón
lo ha arrojado por la ventana.

DÍMELO AHORA

Si todavía
alguna vez
piensas en mí
si todavía
mi recuerdo
te emociona
si todavía
mi nombre
te hace suspirar
si todavía
me darías
miles de besos
dímelo ahora
cabra loca
y te denunciaré.

LLORA LA TARDE

Llora la tarde
aturdida en un rincón.
Lágrimas de olvido
que nadie jamás verá.
Llora sola
cansada
y envejecida.
De tanto en tanto
se asoma por la ventana
y ve ilusiones de vidas
caminando por las calles.
Suspira.
Y vuelve al rincón.
Y recuerda
los buenos tiempos
de cuando era joven
y el tiempo galante
venía cada día a verla.
Y salían a pasear
por las vidas
y por los futuros.
Y eran
durante unas horas
los dueños del universo.
Y el viento sonreía
y los acariciaba a su paso.
Y después
cada noche
antes de irse
el tiempo le regalaba
un collar de besos
y un ramo suave
de hermosas madrugadas.

TODOS

Solos.
Más pronto
o más tarde.
Todos.

NUBES ENAMORADAS

Llueve.
Abro la ventana.
Toco la lluvia.
La siento.
Caen las gotas
como besos
de nubes enamoradas.
Y yo las miro.
Y les guiño un ojo.
Y las nubes se ríen.
Y me llueven
todavía con más ganas.
Y mi corazón
se ilumina
y le canta a la lluvia
y a las nubes
y a tu corazón de hada.

LLUVIA RECIA

No me gusta la lluvia de verano.
Es falsa y traidora.
Me gusta la lluvia recia.
Lluvia de frío y viento huraño.
Lluvia de niño
que mira asombrado
tras las ventanas de su infancia.
Lluvia de tiempos
y personas
que ya no existen.
Lluvia de recuerdos.
Lluvia de suspiros.
Lluvia que estremece el corazón.

SIEMPRE ESTARÁS

Entristecido y roto
me acerco a tu ataúd
y beso entre lágrimas
tu cuerpo muerto
y para no olvidarte
de un mordisco
te arranco tres venas
y un magnífico tendón.

UNA MALDITA ESTAFA

El mundo es oscuro.
La vida es cruel.
El futuro es un pozo muerto.
Los días son pantanos
tenebrosos y malolientes
cada vez más difíciles de soportar.
Hay días que me detengo
y miro alrededor
y miro a la gente
y no comprendo nada.
Tantas prisas.
Tantos afanes.
Tantos despropósitos.
Me fijo bien en la gente
y la verdad me noquea:
todos son medio monstruos.
Los adultos son irrecuperables.
Los niños son aprendices
de futuros esperpentos humanos.
Incluso las mujeres guapas
ya me parecen ranas pintarrajeadas.
Pero nada...
No protesto más
porque los cuerdos
me señalarán con el dedo
y son capaces de medicarme
o de ingresarme en un manicomio
para que me vuelva como ellos.
Nada...
Hay que seguir andando.
Hacia ninguna parte.
Andando entre la basura
y mirando el cielo contaminado
suspirando por volar
con alas inútiles y cursis
de alegría de saldo
y cantando felices
como pajaritos retrasados.
Y por si fuera poco
hay que seguir andando
con una sonrisa
y disfrutando del lodazal
que cada día
nos engulle un poco más.
Algunos repiten
como si fueran mantras
frases de Bucay o de Coelho
para cerebros fosilizados
y dedican toda su vida
a buscar la felicidad
con el mismo éxito
que si buscaran al Ratoncito Pérez.
Otros ven apariciones.
Otros hablan con extraterrestres.
O con mil dioses.
No.
Yo no miento.
Yo no invento.
Yo no deliro.
Yo todavía veo y pienso.
Seguiré andando
entre el rebaño
porque así lo ordena
mi instinto de supervivencia
pero digo alto y bien claro
que esta vida es una maldita estafa.

POESÍA AUTOMÁTICA 6

En la isla de los muertos
hay una mujer
que me sonríe
y me hace señales
con el dedo
para que vaya con ella.

LOS SÓRDIDOS MUTANTES

Están todos podridos.
Desde los días
hasta las personas.
Días repetidos
que aburrirían a los muertos.
Corazones apergaminados
de yo, yo y sólo yo.
Que insoportables me resultan
esas bocas
que sólo hablan de si mismas.
Egoístas y vanidosos
que buscan oídos
donde arrojar sus mentiras.
Mentiras de todo tipo.
De futuros
de pasados
de dinero
de amor...
Además ya no hay amor.
El amor muere cuando eres joven.
Lo de después
son sucedáneos baratos
de pasiones inexistentes
para que suspiren un rato
unos cuantos chiflados
que cualquier día enterrarán.
Ya no hay amor.
Hay asco y maquillaje.
Hay decorados cutres
de situaciones hilarantes
rajados y rotos por el tiempo.
Cada vez está más claro.
Soy un marginal.
Me alejo.
Me voy al desierto
de los días sin nombre
y de los lugares olvidados.
Allí de vez en cuando
otros seres marginales
se dejan caer
y no hace falta hablar
pues una mirada basta
para ver que aún sienten
y que como yo
son unos exiliados
de un mundo y un tiempo
que sólo disfrutan
los sórdidos mutantes
de sonrisas podridas
y corazones de plástico.

EL MONSTRUO GRIS

Escribir lo que siento
es el clavo ardiendo
al que me agarro
para no ser devorado
por el monstruo gris.

JUSTINIANO 152

Como no encuentra trabajo
Justiniano ha tenido una idea
para ganar algo de dinero
y por ello ayer por la noche
se dirigió a las terrazas
de los restaurantes
que estaban llenas de gente
para alegrarles la velada
realizando diversos trucos de magia
y también de variedades
todos ellos fruto
de su portentosa imaginación:
en el primero caminaba a la pata coja
con un gato rabioso en cada mano
intentando arañar en la cara
el máximo número de veces
a los clientes
que estaban cenando
en el segundo se subía a una mesa
y saltaba a las mesas contiguas
con los ojos cerrados
aleteando con los brazos
como si fuera una gallina borracha
y en el tercero
que fue el que más atención suscitó
Justiniano intentaba hacer desaparecer
a la mitad de los clientes
amenazándoles con un palo y una cadena
mientras obligaba a la otra mitad
a cerrar los ojos hasta que acabara el truco
pero incomprensiblemente
e impidiendo que siguiera
con su espléndida actuación
los tacaños y miserables clientes
además de no darle
ni un céntimo de euro
como justo pago por su exhibición artística
han empezado a amenazarle
por lo que Justiniano
ha tenido que escaparse
ya que esas ratas usureras
envidiosas sin duda
de su gran profesionalidad
tenían ganas de darle una terrible paliza.

RETORNO AL NO MUNDO

He vuelto al no mundo.
Al purgatorio
de los muertos en vida.
Todo está como antes.
Pero más viejo.
Las personas también.
Amarillentas y maltrechas.
Como cansadas de vivir.
Explican viajes y vacaciones
con sus lenguas grises y cadavéricas.
Todos fingen.
En realidad a nadie le interesan
las vacaciones de los demás.
Los miro a fondo
y adivino las noticias
de los próximos años.
Tumores, infartos y enajenaciones.
Mejor no les digo nada.
Total ya están muertos...
Hago mi trabajo
y transcurro
lo más invisible que puedo.
De tanto en tanto
el silencio y yo
observamos alucinados
este secarral de vida
donde hasta el aire
debería tomar antidepresivos.
Después nos miramos
con ojos espantados.
Es obvio
que el futuro
se pegaría un tiro
antes de venir por aquí.

LA NOCHE DE NUESTRO TIEMPO

En las sombras de la noche
ya cuando me acuesto
camino en silencio
paso a paso
a través de mis sueños.
Sueños en los que tú y yo
paseamos mil veces
por las hermosas orillas
de estrellas, océanos y vientos.
No estás.
Aún no.
Pero es como si estuvieras.
Ocupas todos los lugares
todos los suspiros
y todos los tiempos.
Te vistes de flor.
De nube.
Y de beso.
Y en cada sueño
ríes y me hablas
y cada palabra tuya
que me regalan tus labios
es un pedazo de cielo
que repito y repito
hasta perder el sentido
como un atribulado eco.
Y sueño con mil caricias
que mueren todas
en los horizontes de tu alma
y en la algarabía de tu cuerpo.
Y bailo con las horas
mientras espero
la noche de las noches
la noche más soñada
la noche de nuestro tiempo.

LOS MALDITOS PURITANOS

Se escandalizan
los malditos puritanos
cuando arremeto
o me burlo
de lo socialmente correcto.
Y me señalan.
Y me advierten.
Y me critican.
Después me olvidan
y más tarde
almuerzan o cenan
viendo las noticias.
De vez en cuando
cabecean lentamente
o dicen "el mundo está fatal"...
Y siguen comiendo
sin ningún remordimiento.
Comen carne y muertos.
Comen ensaladas y guerras.
Comen pan y epidemias.
Comen pescado y tragedias.
Comen postres y miserias.
Y tranquilamente
como bestias
los malditos puritanos
van llenando sus barrigas
hasta que las tienen bien llenas.
Sólo les falta
devorar a las víctimas
que aparecen en la pantalla.
Ay malditos puritanos
de mirada corta
y lengua perversa
cualquier día pobrecillos
entre tanta tragedia
van a tener que ponerse a dieta.

LA JAPONESITA

Estaba la japonesita
sentada en la barra.
Justo enfrente de mi mesa.
Todo el rato
hacía ver
que no me miraba.
Como si yo no le interesara.
He aguantado quince minutos
su farsa sentimental.
He vuelto a mirarla
y seguía disimulando
con sus ojos esquinados
clavados en un libro de poesía.
La paciencia tiene un límite.
Me he levantado
y antes de irme
me he acercado a ella
y sin decirle ni media palabra.
he escupido en su plato de sushi.
Así aprenderá a vencer su maldita timidez.

VIDAS ANÓNIMAS 5

La infancia de Antonio
fue cruel y terrible.
Familia carcomida.
Malos tratos.
Entorno social deplorable.
Colegios lamentables.
Profesores deprimidos
Compañeros pendencieros.
Peleas.
Borracheras.
Droga.
Ilusiones de cartón.
Futuros degollados.
Neuronas en descomposición.
Pero a pesar de todo
Antonio creció
y se hizo hombre.
Se casó con Ángeles
Su novia de toda la vida.
Tuvieron dos niños.
Pedro y Laura.
También se hizo ladrón
Y a los 26 años
en un atraco
la policía lo mató.
De Antonio sólo queda
una foto
en una estantería
alta y apartada
de un mueble del comedor.
Hace años que nadie la mira.
Ni sus hijos.
Ni Ángeles.
Ni tampoco
los hombres
que pagan a Ángeles
cada vez que la visitan.

BENDITO OTOÑO

Bendito otoño
que ya asomas
por el horizonte.
Ven.
Ven por favor.
Ven antes de tiempo
y mete
a toda esta chusma
en sus casas.
Arráncala
de las playas
de las calles
y de las terrazas.
Constípalos.
Llueve y truena
sobre sus cabezas
rellenas de cartón
y sácalos
de una vez
de todos mis horizontes.

LOS ÁNGELES MONSTRUOSOS

Y de entre todos los años
habrá uno
en que hervirá el verano
y a partir de entonces
las carnes se arrugarán
y los angustiados corazones
chillarán de dolor
cada vez que despunte el alba
y los primogénitos de cada familia
despertarán sin orejas y sin ojos
y los ancianos
estallarán por las noches
y en cada hogar
penetrarán siete plagas
a cual más siniestra
y los hombres
se convertirán en sapos
y las mujeres
se convertirán en culebras
y los ríos se teñirán de sangre
y las montañas llorarán laderas
y entre las nubes podridas
los ángeles monstruosos
del infierno más temible
se reirán de tanta desgracia
vestidos con la camiseta del Real Madrid.
(Libro del Apocalipsis, capítulo 30, inédito)

DOS COCODRILOS

Desde hace mucho tiempo
dos cocodrilos 
van siempre conmigo.
Suben conmigo a los taxis.
Caminan a mi lado por las calles.
Se sientan junto a mí en el trabajo.
Miran la tele echados a mis pies.
Duermen bajo mi cama.
Me observan impasibles
mientras desayuno, almuerzo o ceno.
Si alguna noche salgo
se sientan mirándome
en la barra de cualquier bar de copas.
Leen antes que nadie
los poemas que escribo.
Van a nadar conmigo.
Y por supuesto
se acuestan
y se despiertan
justo cuando lo hago yo.
Uno se llama Tristeza.
El otro Desesperanza.
Nadie los ve salvo yo.
Y cuando hablo de ellos
la gente me mira mal
y se inventan consejos
y me dan instrucciones
para que niegue su existencia.
A fuerza de pasar años
mis cocodrilos y yo
pensamos que la gente es ciega
o que hacen como si lo fueran.
Y ya hemos aprendido
a sobrevivir a tanta ceguera.
Ahora ya no los escuchamos.
Vemos como abren sus bocas
y hacemos como si nos interesaran
las solemnes estupideces
que expulsan por esas cuevas
de dientes memos y lenguas necias.
Y dejamos que se vayan.
Y dejamos que se alejen.
Y dejamos que desaparezcan.
Y cada vez más unidos
seguimos caminando
por mi lúgubre existencia
hasta que cualquier día
con apenados mordiscos
mis fieles y reales cocodrilos
muerdan y devoren mi corazón.

EL VIENTO TRAIDOR

El viento traidor
que sopla
desde la memoria
arrastra heridas
de tiempos y personas
que aún están por cicatrizar
y de repente
un día cualquiera
lo oyes llegar
por una grieta olvidada
de tus emociones
y el corazón
empieza a dolerte
y tu equilibrio
se rompe en mil pedazos
y una tristeza
helada y tenebrosa
te estrangula sin piedad.

TINIEBLAS SAGRADAS

Amenaza de nuevo el día
con traernos el sol.
Sol criminal
que muerde
y abrasa
todo lo que ilumina.
Parapetado y protegido
tras el marco de la ventana
veo ya el resplandor asesino
reflejándose en los edificios
que de momento
me sirven de barricada.
Pronto impactarán
los primeros rayos
en mi calcinada ventana.
Habrá que volver entonces
a las trincheras
de mis tinieblas sagradas
donde todavía resisten
rezando aturdidas
las últimas sombras de frescor.

ROSA DE LATIDOS

Rosa de latidos
que un día
de adolescencia
sin saber cómo
en un suspiro brotó.
Rosa de latidos
que aún hoy
te siento
y te recuerdo
como puro amor.

JUSTINIANO 151

Justiniano sigue enamorado
desde hace muchos años
de una mujer misteriosa
que hace tiempo
le robó el corazón
y cada día del año
nada más levantarse
le escribe un poema
que luego guarda en el cajón
de "los poemas de amor"
y aunque ciertamente
Justiniano no es ningún poeta
hay que reconocerle
su hermoso tesón
y su eterna pasión
por esa mujer imposible
a la que escribe cada día
un maravilloso poema de amor
como por ejemplo el de hoy:
"Aunque te hagas vieja
y tengas ya cara de coneja
corazón de comadreja
y patas de abeja
aunque seas una pelleja
de la que todos se quejan
aunque tus cejas
rodeen ahora tus orejas
aunque parezcas una oveja
siempre querré ser tu pareja".

PITAS

Piiiiiitas, Pitas, Pitas, Pitas, Pitas...
Piiiiiitas, Pitas, Pitas, Pitas, Pitas...
Piiiiiitas, Pitas, Pitas, Pitas, Pitas...
Ya estoy aquíiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!!!

ABBEY ROAD

Veo Abbey Road por la webcam:
http://www.abbeyroad.com/crossing
Y pienso
que me gustaría vivir
en una de las casas
que hay en el cruce
de Abbey Road.
Así tendría compañía
todas las horas del año.
Me sentaría en una silla
bajo un árbol frondoso.
Y saludaría a los turistas
que se fotografían
cruzando la calle
imitando a The Beatles.
Y todos los días
los días de viento gris
o de lluvia estrepitosa
incluso los días de sol inclemente
y también los días
de tiempo neutro
y transparente
me levantaría de la silla
y pasearía entre ellos
y les haría fotos
para que recuerden el día
en que pisaron Abbey Road.
Y para que con suerte
algún día de sus vidas
recuerden al hombre anónimo
que les regaló una sonrisa
y un amable pedazo de su tiempo.

LA MUERTE TRISTE

Hace días que me ronda
la muerte triste.
La noto llegar
a primera hora de la tarde.
Justo cuando el sol empieza a declinar.
Invisible y silenciosa
se acerca por la espalda
y en nada se apodera de mi alma.
Entonces una de sus garras
me estruja el corazón
Y una pena inmensa
va ascendiendo hasta mis ojos.
Y a partir de ahí nada es como era.
El mundo se pone al revés
y las cosas bonitas
se golpean la cabeza
y saltan por la ventana.
Y las cosas malas
vienen de todas partes
y chillan monstruosas
bailando a mi alrededor.
Y de repente
un ejército de sombras
me va rodeando.
Y cada latido mío
retumba derrotas conocidas
en una sinfonía
de antiguas lágrimas
que amenazan
con volver a visitarme.
Y montada
en una nube negra
la muerte triste
me señala con el dedo
y poderosa
me arranca atroz
hasta la última esperanza.

NO SON MUY LISTOS

Ayer por la tarde
llovió gasolina
desde las nubes incendiarias.
Y luego
las calles
volvieron a arder.
Calor de infierno.
Calor de jungla.
Calor de fuego.
Al poco rato salí.
Y vi otra vez
a los humanos.
Grupos de humanos
de aquí para allá.
Intenté pasar desapercibido.
Como si fuera uno de ellos.
Suerte que la humedad
y los insectos monstruosos
los tenían distraídos.
Llegué a la playa
y allí reinaba aún
el maldito sol pirómano.
Y cientos de humanos
le ofrendaban sus cuerpos
como si fueran
descerebrados sacrificándose.
Volví a casa
de sombra en sombra
y me encerré otra noche más.
No son muy listos.
Aún no me han detectado.
Espero que pronto
alguien venga a buscarme
y me saque de este planeta
antes de que cualquier día
mi corazón ya no pueda más.

TE ESTOY QUERIENDO

Ahora mismo
te estoy queriendo.
Ahora que el día
nace ante mis ojos.
Ahora que duermes
o que justo te despiertas.
Ahora que ni lo imaginas.
Ahora que brotas
en la tierra de mis sueños.
Ahora que eres beso.
Ahora que eres luz.
Ahora que eres cielo.
Ahora que floreces
en cada una
de mis ruborizadas palabras.

LAS MALDITAS PERSEIDAS

Me he levantado pronto
para ver las Perseidas.
Las malditas Perseidas.
Ni una he visto.
O estaban borrachas por ahí
o se han quedado durmiendo
en sus galaxias
o están encarceladas
por haber robado algún cometa.
Sólo he visto
un cielo negro
calenturiento y bochornoso.
Un cielo negro podrido de calor.
Un cielo negro preñado de nubes sucias.
Un cielo negro
que es la vergüenza del universo.
Suerte que luego vendrá el sol
Y se comerá ese cielo sucio.
Y se comerá también
a las malditas Perseidas
-eso suponiendo
que esas malditas
estrellas embaucadoras
hayan aparecido este año-.
Y por ser de justicia
y por si acaso no han venido
y en base a la autoridad
que yo mismo me otorgo
ordeno ahora mismo
que las malditas Perseidas
se queden castigadas en casa
sin brillar nada
durante todo un año.
Y en cuanto
a este cielo desequilibrado
timador y caradura
si quiere ser perdonado
tendrá que copiar mil veces
en nubes de algodón
"no volveré a tapar las Perseidas
al genial y maravilloso Toro Salvaje".

LA CHINA DEJÓ ATRÁS

La china dejó atrás
unos suspiros rotos
que malviven
y languidecen
en dos zapatos viejos
donde las penas
y los vacíos
caminan sin rumbo
donde la tristeza
deambula sin consuelo.

SE FUGÓ LA CHINA

Se fugó la china
al país de nunca jamás
donde los latidos
son de plástico
y los besos de plexiglás.

SIN AMOR

Esta tarde
he visto pasar
por la calle
al Amor
le he saludado
me ha mirado
y se ha pegado
un tiro en la boca.

DESAGRADABLE

De un tiempo hacia aquí
tengo la cabeza
más fría que nunca
y mis ojos ejercen
de jueces imparciales
en el tribunal de la vida
veo y siento
la verdad de las cosas
en toda su crudeza
con una serenidad
y una templanza de ánimo
que me asombra a mi mismo
también he de decir
ahora que estoy tan centrado
que el mundo
es tan desagradable
como siempre he sospechado.

NOMBRES AMARILLEANDO

Es como si todos
de repente
hubieran muerto
y fueran
sus recuerdos
lo único que quedara
en esta mañana
de verano revelador.
Somos ilusiones
brotando inútiles
en un pozo de adiós.
Nombres amarilleando
en lápidas 
del tiempo ahorcado.
Nadie se salva
del olvido estremecedor.
El viento del futuro
vive en la muerte
del viento del pasado.
Nada fuimos.
Nada somos.
Nada seremos.
Este poema que escribo
nace de la nada que fui
y en mi futura nada morirá.