Recuerdo
cuando me miraste
por primera vez.
Es una imagen
que tatué
en mi memoria.
A unos metros.
Mirándome.
Tu sonrisa.
Tu mirada reluciente.
Tus latidos tan evidentes.
Cada vez
que acaricio
ese recuerdo
de flores y campanas
se emociona mi corazón.
Poema de Toro Salvaje.
ResponderEliminarQué bien que esas primeras miradas, esas primeras caricias queden tatuadas con tinta indeleble. Emocionar al corazón pocas personas lo consiguen. Me alegra mucho cuando son sensaciones duraderas, porque ahora parece que todo es aquí y ahora, intenso y fugaz.
ResponderEliminarUn beso
Hermoso recuerdo.
ResponderEliminarBesos
Para mí,luz de una tarde.
ResponderEliminarMuack
Esas cosas son las que nos hacen seguir respirando.
ResponderEliminarSaludos.
Maravillosos recuerdos de un ahora que dura siempre.
ResponderEliminarUn beso
ResponderEliminarJoyas que atesora el corazón.
Beso... senti-mental.
Pues desde este lado de la pantalla la escena ha llegado nítida.
ResponderEliminarEso significa que el poeta ha volcado su corazón en forma de letras.
Bss.
Qué maravillas. Lo dices de una manera, que conmueve.
ResponderEliminarBesos
Y repican a gloria esas campanas al mismo tiempo. ¡Qué bonito Toro!!
ResponderEliminarBesicos muchos.
Una bonita vista
ResponderEliminarquizá una desértica
alucinación
en mitad de la nada