Una espiral infinita
de tiempos y desenlaces
mueve los hilos de las vidas.
Es la espiral del destino.
Es la espiral del interrogante sin fin.
Una espiral de miedo y esperanza.
Una espiral que acaricia y araña.
Y no hay hombre que pueda dominarla.
Ella se ríe.
Ella señala.
Ella manda.
Ella entrega.
Ella arrebata.
Ella hace con nosotros lo que le da la gana.
Poema de Toro Salvaje.
ResponderEliminarTal cual,el bucle de la vida.
ResponderEliminarUn tirabuzón de besos pa ti.
Somos marionetas que desconocemos quién nos mueve.
ResponderEliminarUn beso.
A veces creo en el destino y otras no. No sabría decirte ahora mismo.
ResponderEliminarPero me entristece pensar que somos marionetas hagamos lo que hagamos.
Un beso