Han vuelto
a mis noches
los muertos del no tiempo.
Y han vuelto enfadados.
No me perdonan una.
Claman venganza
con odio
con rabia
y han perdido la razón.
Me arañan.
Me atacan.
Me muerden.
Me despedazan.
Hora tras hora.
A veces logro escaparme
y me despierto
aterrado y angustiado
en la noche enloquecida
mientras ellos esperan
con sus ojos hirviendo
que vuelva al sueño criminal.
Poema de Toro Salvaje.
ResponderEliminarLa razón se ha perdido en los sueños y no sueños. Angustioso momento.
ResponderEliminarBesos
En sueños todos debemos matar a ese otro que nos aniquila y debilita, no dudo de que tu sueño sea un muñeco de plastilina entre tus manos, te sobran razones para modelarlo.
ResponderEliminarUn beso.
Ojos hirviendo...qué terror...
ResponderEliminarEscalofrío.
Pesadillas para intentar olvidar y seguir entre vivos.
ResponderEliminarUn beso
Tienes esos breves momentos de sosiego, antes de cada sueño infame.
ResponderEliminarSaludos.
Parecen jueces.
ResponderEliminarEl rencor les anida. No parece posible la escapatoria.
Y total... si vuelven y vuelven.
Bss.
Un poema con gran fuerza y desgarro.
ResponderEliminarBesos
No les hagas caso, te tienen envidia de que no estás con ellos.
ResponderEliminarlo leo después de escuchar lo de Somalía y los bombazos
ResponderEliminara veces el odio y la ceguera profética se hace coro energético
abrazos Toro
Tenemos que ser responsables pero no podemos cargar con lo que no podemos controlar, por más impotencia que nos acarré.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Siempre estas acompañado
ResponderEliminarno te quejes
sarna con gusto no pica
miel sobre hojuelas